El conductor del Tesla Cybertruck que explotó este miércoles frente al Trump International Hotel en Las Vegas fue identificado como Matthew Alan Livelsberger, un militar en actividad de 37 años.
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El conductor del Tesla Cybertruck que explotó este miércoles frente al Trump International Hotel en Las Vegas fue identificado como Matthew Alan Livelsberger, un militar en actividad de 37 años.
La intensa investigación sobre posible terrorismo sugiere que podría haber conexiones entre este incidente y el atropello masivo ocurrido el mismo día en Nueva Orleans, protagonizado por un exsoldado, identificado como Shamsud Din Jabbar.
La explosión dejó a Livelsberger muerto y siete personas heridas. Fue provocada desde dentro del vehículo, cargado con morteros de fuegos artificiales y garrafas de combustible para campamentos. Según fuentes oficiales citadas por CNN, el sujeto formaba parte de las fuerzas especiales del ejército.
El militar tenía vínculos con Fort Bragg, una enorme base del ejército en Carolina del Norte que alberga el comando de fuerzas especiales del ejército. Tres funcionarios estadounidenses confirmaron su identidad a Associated Press.
Por su parte, el CBS News informó que Livelsberger estaba sirviendo en Alemania en el momento de la explosión, pero estaba de permiso en Colorado. La policía de Las Vegas afirma que el conductor detonó desde el interior del carro una combinación de fuegos artificiales, tanques de gasolina y combustible.
El conductor del Cybertruck murió y otras siete personas que se encontraban cerca del Trump International Hotel resultaron heridas.
Por lo tanto, las autoridades investigan si el ataque en Las Vegas está conectado con el atropello masivo en Nueva Orleans, donde un veterano estadounidense identificado como Shamsud-Din Bahar Jabbar dejó al menos 15 muertos y decenas de heridos.
Cabe mencionar que los dos vehículos involucrados, tanto el Cybertruck como la camioneta, habían sido alquilados a través de la plataforma Turo, que permite el alquiler de autos entre particulares, según confirmó la empresa en un comunicado.
El FBI está investigando ambos casos como posible actos de terrorismo y analiza si están vinculados entre sí.