Israel lanzó el lunes una serie de ataques aéreos contra objetivos estratégicos del gobierno iraní en Teherán, entre ellos la prisión de Evin y la sede de seguridad de la Guardia Revolucionaria, en respuesta a la reciente ofensiva de Irán con misiles y drones, y en el contexto de una creciente participación de Estados Unidos en el conflicto.
El Ministerio de Defensa israelí confirmó los bombardeos y advirtió: “El dictador iraní será castigado con toda la fuerza por atacar el frente interno israelí”. La ofensiva se produjo un día después de que Estados Unidos, bajo el gobierno de Donald Trump, lanzara una operación contra tres instalaciones nucleares en Irán, incluida la planta subterránea de Fordo, que volvió a ser atacada el lunes, según la televisión estatal iraní.
La prisión de Evin, conocida por albergar prisioneros políticos y ciudadanos con doble nacionalidad usados como moneda de cambio por el régimen, fue uno de los blancos de los bombardeos. El sitio web oficial Mizan Online confirmó el ataque y reportó daños estructurales en el penal, mientras que la televisión estatal iraní difundió imágenes de vigilancia del momento del impacto.
Desde Israel, el canciller Gideon Saar celebró el ataque a Evin citando una frase del presidente Javier Milei: “Le advertimos a Irán una y otra vez: dejen de atacar civiles. Continuaron, incluso esta mañana. Nuestra respuesta: ¡Viva la libertad carajo!”, publicó en X.
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El ejército israelí declaró que los ataques apuntaron a “centros de mando del régimen y agencias represivas del gobierno en el corazón de Teherán”, incluyendo a la milicia Basij y a la Guardia Revolucionaria, una fuerza ideológica clave del régimen iraní que responde directamente al líder supremo, Ali Khamenei.
En paralelo, Irán lanzó una nueva ola de su operación denominada “Promesa Verdadera 3”, con ataques dirigidos hacia las ciudades israelíes de Haifa y Tel Aviv, y explosiones registradas también en Jerusalén. Hasta el momento, no se reportaron víctimas ni daños materiales importantes.
Desde Irán, el general Abdolrahim Mousavi advirtió que los ataques de EE.UU. “han dado carta blanca” a las fuerzas iraníes para responder contra “los intereses y el ejército estadounidense” en la región, donde decenas de miles de tropas norteamericanas están desplegadas en áreas al alcance de misiles iraníes de corto alcance.
La comunidad internacional observa con creciente preocupación una posible escalada regional. El bombardeo de una prisión que alberga a extranjeros desató duras críticas: Noémie Kohler, hermana de una ciudadana francesa detenida en Evin desde 2022, calificó el ataque como “completamente irresponsable” y expresó su temor por la vida de los reclusos: “No tenemos noticias, no sabemos aun si están con vida. Estamos en pánico”.