El flamante papa León XIV, elegido recientemente en el Vaticano, es considerado uno de los cardenales estadounidenses con mayor conexión con América Latina. Su elección, que da continuidad al camino marcado por Francisco, reafirma el compromiso de la Iglesia Católica con la región.
León XIV ya sorprendió al mundo al incluir el español en su primer discurso como pontífice, un gesto simbólico pero cargado de intención.
PAPA LEON XIV
El nuevo papa León XIV, el estadounidense Robert Francis Prevost.
EFE
¿Por qué Francisco eligió a Robert Prevost para liderar la Iglesia en América Latina?
Aunque nació en Chicago, Robert Prevost construyó un vínculo profundo con Latinoamérica desde joven. Francisco lo designó en 2023 como prefecto del Dicasterio para los Obispos, un cargo de enorme peso que supervisa los nombramientos episcopales en más de la mitad del mundo católico.
Ese mismo año, también lo nombró cardenal obispo, el rango más alto dentro del Colegio Cardenalicio.
Prevost, que ahora lleva el nombre de papa León XIV, fue durante mucho tiempo una figura de perfil bajo. A pesar de su cargo como presidente de la Pontificia Comisión para América Latina, rara vez aparecía en los medios.
De hecho, su nombre era casi desconocido fuera de Perú, donde había servido durante décadas. Sin embargo, su capacidad para escuchar y mediar en temas complejos lo convirtieron en un hombre clave dentro del círculo de confianza de Francisco.
“Mantener la unidad en la diversidad es un verdadero desafío, sobre todo cuando la polarización se ha convertido en la norma de una sociedad que, en lugar de buscar la unidad como principio fundamental, oscila entre extremos”, afirmó en una entrevista con los Agustinos.
Su mensaje, claramente alineado con el pensamiento de Francisco, busca reforzar la idea de que la Iglesia debe ser un puente en tiempos de división.
¿Cuál fue el recorrido de León XIV antes de llegar al Vaticano?
Prevost aterrizó en Perú en 1984, con apenas 29 años, recién licenciado en Derecho Canónico por la Universidad Pontificia de Santo Tomás de Aquino.
Primero estuvo en Chulucanas, una región andina remota, y luego se trasladó a Trujillo, donde lideró la formación religiosa. En 2001 dio el salto a Roma como prior general de los Agustinos, un cargo que ocupó hasta 2013.
En 2014, en plena crisis de la Iglesia peruana por denuncias de abusos, Francisco lo llamó para ser obispo de Chiclayo, una decisión vista como un intento de restaurar la credibilidad en la región.
Y casi diez años más tarde, en un movimiento inesperado, lo convocó de nuevo a Roma para suceder al cardenal Marc Ouellet en el poderoso Dicasterio para los Obispos.
Lejos de las disputas ideológicas que marcaron los últimos años del pontificado de Francisco, León XIV se mantuvo como un actor conciliador. Evitó conflictos abiertos con los obispos alemanes durante la polémica Vía Sinodal, mostrando siempre un perfil de diálogo.
PAPA LEON XIV
El nuevo papa León XIV, el estadounidense Robert Francis Prevost.
EFE
“No podemos confundir unidad con uniformidad ni aceptar la diversidad como una situación desprovista de normas y orden”, aclaró en la misma entrevista, dejando en claro que su visión busca equilibrio.
La Pontificia Comisión para América Latina, que presidió desde 2023, tiene un rol central en la relación del Vaticano con nuestra región. Creada en 1958 por el papa Pío XII, funciona bajo la órbita del Dicasterio para los Obispos y ha sido históricamente clave para sostener lazos con América Latina.
Durante su gestión, Prevost trabajó junto a dos secretarios laicos: Rodrigo Guerra López y Emilce Cuda, quienes marcaron un hito al ocupar cargos de alto rango en la Curia Romana, algo poco habitual hasta hace pocos años.