Sarah Grace Patrick, una joven de 17 años, fue detenida y enfrenta cargos por el asesinato de su madre, Kristen Brock, de 41 años, y de su padrastro, James Brock, de 45 en Georgia, Estados Unidos
Sarah Grace Patrick, de 17 años, subía videos llorando a TikTok por la muerte de sus padres y fue acusada como responsable de los homicidios. Fue su hermana menor quien descubrió los cuerpos.
Sarah Grace Patrick, una joven de 17 años, fue detenida y enfrenta cargos por el asesinato de su madre, Kristen Brock, de 41 años, y de su padrastro, James Brock, de 45 en Georgia, Estados Unidos
El trágico suceso tuvo lugar el pasado 20 de febrero en Tyus, Georgia. Fue la hermana menor de Sarah, una niña de cinco años, quien descubrió los cuerpos sin vida de la pareja en su hogar.
La llamada al 911 fue realizada por la propia Sarah. A partir de ese momento, la Oficina del Sheriff del Condado de Carroll puso en marcha una investigación minuciosa.
“Nuestro equipo examinó una gran cantidad de pruebas tanto físicas como digitales, trabajando en conjunto con el FBI y el laboratorio criminalístico del estado de Georgia”, señaló Ashley Hulsey, vocera de la dependencia.
Al llegar a la escena del crimen, los investigadores detectaron de inmediato que no había señales de que alguien hubiese forzado la entrada a la vivienda. Una de las puertas estaba entreabierta, pero no se registró el robo de ningún objeto.
Otro aspecto que despertó sospechas entre los investigadores fue el emotivo discurso que Sarah pronunció durante el funeral de su madre y posteriores publicaciones en TikTok. Para las autoridades, ese mensaje no fue solo una expresión de duelo, sino un posible intento de desviar la atención y ocultar su implicación en el asesinato.
A Sarah Patrick se le imputan dos cargos de homicidio y dos por asalto agravado. De acuerdo con el New York Post, será procesada como adulta y, en caso de ser hallada culpable, podría recibir una condena de cadena perpetua sin opción a libertad condicional.
Por ahora, la investigación continúa activa y no se descarta la posibilidad de nuevos arrestos. “Cualquier información, por pequeña que sea, podría ser clave para resolver este caso”, concluyó Hulsey.