Hay accesorios que nunca desaparecen del radar de la moda, y el cinturón es uno de ellos. Sin embargo, esta temporada el clásico cinturón negro finito cede protagonismo frente a versiones más audaces y expresivas.
En un contexto donde la moda valora tanto la comodidad como la expresión individual, los cinturones se presentan como aliados perfectos.
Hay accesorios que nunca desaparecen del radar de la moda, y el cinturón es uno de ellos. Sin embargo, esta temporada el clásico cinturón negro finito cede protagonismo frente a versiones más audaces y expresivas.
Este otoño-invierno 2025, los cinturones se reinventan: anchos, de cadenas, con hebillas llamativas o incluso con texturas inesperadas, pasan a ocupar un rol protagónico en los looks urbanos y elegantes.
Lejos de limitarse a un detalle funcional, el cinturón se convierte en pieza central del outfit. Las tendencias apuestan a la exageración controlada, y eso se traduce en accesorios que tienen peso visual, carácter y un guiño claro al empoderamiento estético.
Esta temporada, más es más: diseños audaces, materiales innovadores y tamaños fuera de lo común se apoderan de la cintura. Si bien el cinturón finito negro siempre tendrá su lugar, este otoño-invierno invita a animarse al cambio, y a hacer de cada outfit un espacio para destacar.
La necesidad de jugar con las proporciones y destacar la figura sin caer en lo predecible impulsa esta transformación. En un contexto donde la moda valora tanto la comodidad como la expresión individual, los cinturones se presentan como aliados perfectos para marcar siluetas y sumar personalidad, sin dejar de ser prácticos.
Además, el auge de prendas oversize -como los blazers, sacos de punto grueso y tapados amplios- genera el escenario ideal para incorporar cinturones anchos o llamativos que definan la cintura y aporten contraste. El resultado es una estética poderosa, con aire retro pero actualizada, que remite tanto al glamour de los años 80 como a la elegancia urbana contemporánea.