Con el fin de la moratoria previsional en mayo de 2025, la ANSES dejó sin efecto una herramienta clave que permitía a muchas personas acceder a la jubilación sin contar con los 30 años de aportes requeridos.
Cambios recientes en el sistema previsional modifican las condiciones para acceder a haberes en adultos mayores sin los aportes necesarios.
Con el fin de la moratoria previsional en mayo de 2025, la ANSES dejó sin efecto una herramienta clave que permitía a muchas personas acceder a la jubilación sin contar con los 30 años de aportes requeridos.
Esta decisión impacta en el acceso a la jubilación, y también en las pensiones por fallecimiento, que ahora presentan nuevas limitaciones según el tipo de prestación.
Una de las principales consecuencias es que quienes accedan a la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM) ya no podrán cobrar la pensión por viudez en caso de fallecimiento de su pareja jubilada, algo que sí estaba contemplado dentro del régimen general.
La eliminación de la moratoria previsional dejó fuera del sistema jubilatorio tradicional a quienes no completaron los 30 años de aportes. En ese contexto, la PUAM surge como única opción posible para personas mayores de 65 años sin aportes suficientes, aunque con restricciones importantes. Entre ellas, la más significativa es la imposibilidad de acceder a una pensión por fallecimiento.
Según lo indicado por la ANSES, entre los requisitos de la PUAM se aclara que "no permite cobrar pensión por viudez", una diferencia clave respecto al régimen contributivo.
Además, esta pensión no contributiva se reserva exclusivamente para personas en situación de vulnerabilidad económica, se pierde si hay residencia en el exterior y solo se otorga a partir de los 65 años, sin distinción de género.
De esta manera, se limita el alcance de las pensiones por fallecimiento a quienes puedan jubilarse por el régimen general, excluyendo a un número creciente de personas que, sin la moratoria vigente, ya no reúnen los requisitos exigidos.
La PUAM equivale al 80% del haber mínimo jubilatorio, lo que en julio de 2025 representa un ingreso mensual de $ 247.435,83. A esta cifra se suma un bono extraordinario de $ 70.000, otorgado por el Gobierno nacional, lo que lleva el monto total a $ 317.435,83 para ese mes. Este haber se actualiza conforme a las decisiones oficiales y a la evolución de la inflación.
Para solicitar la PUAM, es necesario contar con una clave de la seguridad social, tener los datos personales actualizados en los registros de ANSES y solicitar un turno presencial para iniciar el trámite en una oficina del organismo. Si bien no exige aportes previsionales, se requiere acreditar vulnerabilidad económica mediante documentación respaldatoria.
La PUAM se mantiene como la única vía de acceso a haberes para quienes no cumplen los requisitos de la jubilación ordinaria. No obstante, su alcance es limitado y no contempla derechos como el cobro de pensiones por fallecimiento, lo que deja a muchas personas sin esa cobertura ante la pérdida de su pareja.