En sus últimos años, la salud del fisicoculturista se deterioró por el uso de synthol, una sustancia peligrosa que genera un crecimiento muscular artificial.
Murió Nikita Tkachuk, el "Hulk ruso", por una falla multiorgánica
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Web El fisicoculturista ruso Nikita Tkachuk, apodado el “Hulk ruso”, murió a los 35 años el pasado sábado en San Petersburgo como consecuencia de una falla multiorgánica. Su esposa, Maria Tkachuk, también culturista profesional, confirmó la noticia a través de un sentido mensaje en redes sociales: “Nikita, mi amado esposo, murió. Sus riñones fallaron, sufrió edema pulmonar y su corazón se rindió”.
Tkachuk había sido una figura reconocida en el mundo del culturismo y el powerlifting. Su carrera se catapultó al éxito cuando, a los 21 años, fue nombrado “Maestro del Deporte”. Alcanzó marcas impresionantes: 350 kg en peso muerto, 360 kg en sentadilla y 210 kg en press de banca.
Pese a su éxito deportivo, su salud comenzó a deteriorarse tras firmar un contrato con una farmacéutica que lo obligó a usar synthol, una sustancia inyectable que genera un crecimiento muscular artificial.
“Si pudiera volver a 2015-2016, no lo haría. Arruiné mi carrera deportiva”, confesó Tkachuk en una entrevista dos años antes de su muerte. “No lo entiendo. Bueno, si tu brazo mide 45 o 50 cm, ¿qué cambiará en tu vida? Vas a perder mucha salud. No vale la pena”.
El uso de synthol provocó una transformación física drástica y dañina. Además, luego de contagiarse de COVID-19, Nikita fue diagnosticado con sarcoidosis, una enfermedad autoinmune que afecta distintos órganos. A pesar de varias cirugías, su cuerpo acumuló calcio en piernas y caderas, hasta que sus órganos vitales comenzaron a fallar.
En medio del dolor, María denunció el acoso de la prensa tras la muerte de su esposo:“Un gran número de diarios me llamaron en las últimas horas para hablar sobre la muerte de Nikita. Están tratando de engañarme para que vaya a programas de televisión y montar un show. Ya daré una historia detallada, pero no es el momento”.
La Federación de Deportes de Fuerza de Ukhta también se expresó con pesar por la pérdida:“Durante muchos años, Nikita logró el éxito en el levantamiento de pesas, la fuerza extrema y el culturismo, inspirando a quienes lo rodeaban con su determinación y perseverancia”.
La muerte de Tkachuk recuerda al caso de Illia Golem, otro fisicoculturista de 36 años que falleció en 2023. Conocido como el “fisicoculturista más monstruoso del mundo”, consumía 16.500 calorías al día, inyectaba hasta 50 dosis de insulina diarias y también usaba synthol, como Nikita.
Ambos casos exponen los peligros del uso extremo de sustancias químicas en el culturismo, así como las consecuencias devastadoras que pueden tener sobre el cuerpo, incluso en atletas de alto rendimiento.