El defensor de Boca acudió al Monumental con una gorra que recuerda al descenso de un rival que se encargó de festejar la victoria en el Superclásico.
El superclásico tuvo dos hechos picantes
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En la edición 264 del Superclásico del fútbol argentino, el mundo pudo ver a River vencer 2 a 1 a Boca y acercarse en el historial. Lo cierto es que en este duelo disputado en el Más Monumental se pudo observar un partido intenso, donde ambos equipos, con propuestas dispares, alimentaron el espectáculo.
Hay que decir que la previa al partido también dejó muchas cosas y una de ellas fue la polémica aparición de Marcos Rojo en los túneles del estadio millonario, en una actitud bastante provocadora, ya que el capitán Xeneize acudió con vestimenta del club, pero con la gora de los Boston Red Sox (un equipo de baseball) que curiosamente tenía una letra “B” roja en el frente, lo que se podría tomar una chicana para los hinchas del Millonario en recuerdo de aquel descenso acontecido en 2011.
Hay que decir que el partido de Rojo tampoco fue el mejor, con una amarilla en tempranos minutos del partido tras una falta al borde del área que Franco Mastantuono tradujo en el primer gol de los de Núñez. A los 67' fue reemplazado por Lautaro Di Lollo.
River se quedó con el Superclásico al vencer 2 a 1 a un extraño y desdibujado Boca Juniors. Lo cierto es que tras finalizar el encuentro, los futbolistas del Millonario festejaron con una picante dedicatoria para sus máximos rivales.
“Un minuto de silencio para Boca que está muerto”, fue el cántico de los futbolistas de River en el medio de la cancha, mientras observaban a los hinchas que los acompañaban desde las tribunas.
Recordemos que los dirigidos por Marcelo Gallardo ya venían de quedarse con el clásico anterior al obtener un triunfo 1-0 en la Bombonera. En esta ocasión, los autores de los goles fueron Franco Mastantuono de tiro libre y Sebastián Driussi. El empate parcial lo había marcado Miguel Merentiel tras una distracción de Germán Pezzella.