Este histórico club italiano atraviesa el peor momento de su historia y recibió el descenso administrativo por impago. El 12 de junio se confirmará su destino.
Roberto Baggio , Stephen Appiah y Pep Guardiola en la temporada 2002/03
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Tras 114 años de historia, un club emblemático del fútbol italiano cierra sus puertas y dice adiós a la competencia profesional. Se trata del Brescia Calcio, una institución que pese a no formar parte de la élite del fútbol europeo, supo ser cuna y refugio de nombres ilustres del deporte como los de Roberto Baggio y Pep Guardiola.
La decisión fue tomada por la Federación Italiana de Fútbol (FIGC), a raíz de una profunda crisis económica. El club, fundado en 1911 y con varios pasos por la Serie A en su haber, no podrá competir en las categorías de Serie B, ni Serie C durante la próxima temporada.
La sanción llegó tras una deducción de cuatro puntos en la tabla, aplicada por la FIGC debido a incumplimientos económicos. Esa penalización precipitó su descenso directo, cuando aún se esperaba que disputara un partido por la permanencia. Con esa reconfiguración de la tabla, Frosinone se salvó del descenso y se habilitó un inesperado playoff entre Sampdoria y Salernitana.
Lo cierto es que la situación financiera del Brescia es crítica: acumula una deuda estimada entre 4 y 6 millones de euros, principalmente en sueldos impagos y cargas fiscales. Actualmente, el club se encuentra en negociaciones con la Agenzia delle Entrate —el fisco italiano— y con posibles inversores privados, en una carrera contra el tiempo por evitar la disolución total y reinsertarse, al menos, en las divisiones amateurs.
Hay que decir que la decisión todavía no queda firme, ya que la actual dirigencia del club presentó una apelación que será tratada el próximo 12 de junio por la Corte de Apelaciones de la FIGC. De ese fallo dependerá el futuro inmediato del Brescia: si podrá conservar alguna posibilidad de reinserción al sistema federado o si deberá comenzar desde cero, fuera de la pirámide profesional.
La exclusión del Brescia no solo representa la pérdida de un club con rica historia y tradición, sino también un temible reflejo de los desafíos estructurales que atraviesan muchas instituciones del fútbol europeo, donde algunos gigantes siguen creciendo, otros históricos se hunden bajo el peso de las deudas y la mala gestión administrativa.
Esto deja en el tapete a un club histórico como Brescia, donde pasaron glorias del deporte como Andrea Pirlo, Roberto Baggio y Luca Toni, tres de las figuras más conocidas del fútbol italiano. Además, este fue el segundo club donde sumó minutos Pep Guardiola, quien compartió plantel con Baggio a comienzos de siglo. Ya más cercano en el tiempo, el eslovaco Marek Hamsik surgió del club y también Sandro Tonali, hoy unos de los referentes de la Selección italiana.