Ocurrió en Reino Unido y trascendió al mundo. Un detective privado, involucrado en el caso, contó la insólita historia.
Descubrió que le eran infiel por un cepillo de diente.
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WebUna mujer de Reino Unido descubrió la infidelidad de su esposo gracias a un objeto totalmente insólito e inesperado: un cepillo de dientes inteligente. Según reveló un reconocido investigador privado, la esposa notó movimientos inusuales al revisar la aplicación del dispositivo y empezó a atar cabos.
El patrón se repitió varias veces, siempre en momentos en que su marido aseguraba estar en la oficina. La situación terminó por confirmar sus sospechas: mientras creía que estaba en el trabajo, en realidad el hombre aprovechaba para verse con otra mujer en su propia casa.
El caso fue contado por Paul Jones, detective privado del Reino Unido con más de diez años de experiencia. Según relató, la mujer había comenzado a monitorear el cepillo inteligente como parte de un intento por mejorar la higiene dental de sus hijos, sin imaginarse que terminaría descubriendo eso.
La aplicación mostraba que el dispositivo se utilizaba en horarios extraños, específicamente los viernes a media mañana, cuando los chicos estaban en la escuela y el esposo supuestamente en la oficina.
Luego de comprobar que los niños no eran los responsables, la mujer interrogó a su pareja, quien sostuvo que no se había movido de su lugar de trabajo. Sin embargo, las alertas de la app seguían apareciendo.
"Mi clienta notó que el historial de cepillado de su pareja se registraba en horarios poco habituales", explicó Jones en una entrevista. "Al principio, no parecía gran cosa; cepillarse los viernes a última hora de la mañana no era una señal de alerta inmediata", agregó.
Con el tiempo, la frecuencia y los horarios terminaron revelando la verdad: su marido se quedaba en casa por las mañanas de los viernes para mantener una relación extramatrimonial con una compañera.
“Tiene fecha y hora. A menudo se basa en la ubicación y no refleja las emociones”, detalló el detective sobre los datos de estos dispositivos. “Cuando uno de estos aparatos indica que alguien se cepilló los dientes a las 10:48 a. m., cuando debía empezar a trabajar a las 9 a. m., es muy difícil justificarlo”, cerró.