Existen semillas capaces de germinar tras miles de años. Descubre tres plantas con esta asombrosa resistencia. Jardín y curiosidades en una nota.
3 semillas que pueden sobrevivir miles de años y seguir creciendo
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La naturaleza siempre sorprende con su increíble capacidad de supervivencia. Algunas semillas pueden permanecer inactivas durante siglos o incluso milenios, esperando las condiciones adecuadas para germinar. Este fenómeno es un claro ejemplo de la resiliencia de las plantas, que pueden desafiar al tiempo y seguir creciendo.
Para los amantes del jardín y la botánica, conocer estas especies es una verdadera maravilla dentro de las curiosidades naturales.
Esta hermosa planta acuática no solo es un símbolo de pureza en muchas culturas, sino que también posee una longevidad sorprendente. Se han encontrado semillas de loto sagrado con más de 1.300 años de antigüedad en China, que lograron germinar exitosamente. Su capacidad de resistencia a condiciones extremas la convierte en una de las especies más impresionantes del mundo vegetal. Para quienes disfrutan de los estanques en su jardín, el loto es una excelente opción.
En el 2005, científicos lograron germinar una semilla de esta planta que tenía aproximadamente 2.000 años de antigüedad. Fue encontrada en las ruinas de Masada, Israel, y desde entonces ha crecido hasta convertirse en una palmera adulta. Esta increíble historia demuestra cómo la vida puede permanecer latente por siglos, esperando el momento perfecto para desarrollarse. Sin duda, un dato fascinante dentro de las curiosidades botánicas.
Esta modesta planta siberiana ostenta el récord de la semilla más antigua en germinar. Científicos rusos encontraron restos congelados de esta especie con una antigüedad de más de 30.000 años en el permafrost. Al descongelarlas y cultivarlas, lograron obtener una flor idéntica a las variedades modernas, lo que demuestra la increíble resistencia de algunas especies a través del tiempo. Sin duda, un hallazgo impactante para quienes aman las curiosidades del mundo vegetal.
Estas tres especies nos enseñan que la vida puede permanecer dormida durante siglos y volver a florecer en el momento adecuado. Para los entusiastas del jardín y la botánica, estas historias refuerzan la fascinación por la naturaleza y su increíble capacidad de adaptación.
