Un grito a la Vida: el proyecto de Juan Pablo Ledo y Sol Pérez Magnelli

Él es el primer bailarín del Teatro Colón, ella es bailarina contemporánea campeona Latinoamericana de Dance World Cup 2019. No se conocían, no habían escuchado hablar el uno del otro, pero su pasión por la danza cruzó fronteras y los llevó a embarcarse en este desafío que causó gran impresión en las redes.

"Yo tenía ganas de hacer algo diferente porque ya venía haciendo cosas solo y cuando elegí la música de David Garrett, que tiene un montón, pero cuando escuché esa canción dije 'esto lo tengo que hacer'", contó Juan Pablo Ledo en conversación con Los Andes. "A Sol la conocí por Instagram, no sé cómo porque uno se va conectando. Yo le había comentado por un premio que ella había ganado y le dejé un mensaje felicitándola y ella me contestó y quedó todo ahí. Fue algo muy casual, le pregunté si le gustaría hacer algo conmigo y ella enseguida agarró viaje".

Sol Pérez Magnelli está inmersa en el ambiente contemporáneo, el año pasado participó del DWC 2019 y salió ganadora en su categoría habilitándola a participar del mundial en Roma aunque debido a la pandemia se pospuso para el año próximo. Hablamos con ella sobre el proyecto y contó su experiencia: "Juan me propuso que hagamos un video juntos a distancia para mostrar algo nuevo a la gente y que no sean puras noticias negativas. Me dijo 'Dos cuerpos, una música'. Me mandó la canción, a mí me encantó y comenzamos a trabajar".

Ambos bailarines interpretaron la versión de David Garrett del conocido tema de Coldplay "Viva la Vida". La elección de la canción no fue al azar e incluso está en sintonía con lo que ellos buscaban transmitir: una esperanza incluso en tiempos de pandemia.

Un encuentro casual que terminó en una obra de arte uniendo dos ambientes de la danza totalmente distintos. "Esto fue un balde de agua fría, el resultado fue muy bueno y la idea era contar algo que nos pasaba desde un lugar ajeno al que nosotros nos movemos. Ella tiene un lenguaje más contemporáneo y mucha acrobacia, mezclado con lo que yo hice que prácticamente no me moví del banco, fue algo distinto", contaba Juan Pablo.

"Buscamos no a Sol y Juan Pablo mostrando algo, sino contando algo. Que el plano principal sea el arte. Cuando uno ve una obra de arte dice que el pintor es fantástico pero después extraés la obra del autor. Esto terminó siendo una obra y fue lo que generó esto atractivo para quienes lo vieron".

Un desafío con todas las letras

Ambos en la entrevista compartieron la misma anécdota. Entenderse a distancia y más cuando jamás han tenido la oportunidad de compartir un espacio en común puede resultar una dificultad.

Casi dos semanas les llevó armar el video porque hubo ciertas barreras en el medio. "Yo estoy en un lugar íntimo cerrado con el torso desnudo y la idea era expresar desde el movimiento del cuerpo, desde la sensibilidad corporal. Ella tenía una blusa suelta que distorsionaba el cuerpo, era más la blusa que el cuerpo mismo", contó Ledo.

"Le dije que no iba pero a todo esto ella ya había grabado todo, había cumplido todas mis recomendaciones. Ahí le dije la mala noticia y fue difícil porque cuando uno hace todo un trabajo y el otro dice 'no va' es complicado. Traté de ser lo más suave posible y después de un silencio importante me dijo que estaba bien, al otro día lo grabó con otro vestuario y se hizo como teníamos planificado".

Más allá de este obstáculo y con mucho esfuerzo de ambos, los artistas lograron entenderse, llegar a completar el proyecto y estar conformes del resultado final que ya tiene más de 2.000 reproducciones en Instagram.

"Fue todo un desafío porque nunca había trabajado con alguien a distancia y que sea todo por whatsapp, videollamada o teléfono. Es difícil porque entender al otro y no poder verlo es más complicado. Por suerte pudimos lograrlo", compartió Sol.

¿Los próximos planes?

Por un lado Juan Pablo comentaba que ya está en proceso ampliar este proyecto y seguir conectándose con artistas de cualquier parte del mundo. "La idea es poder organizar con distintos artistas. Tengo en camino proyectos con otros bailarines de otras partes del mundo que conozco y ya estamos al habla. Esta fue la prueba piloto porque generalmente en mi instagram he subido videos propios y la idea era contagiar a la gente para que hicieran los suyos y estuvo bueno. Pero la idea de sumar una persona diferente y hacer algo en equipo, esta fue la primera vez".

Aquí en Mendoza, Sol continúa con su entrenamiento para el año que viene que participará en Roma, aunque por el momento no hay otras ideas en mente. "Me encanta esta idea de proyectos, por el momento no tengo nada planificado, estoy muy metida en esto porque ahora hicimos un video explicando cómo se dio todo. La gente nos pregunta cómo coincidimos nosotros dos. Me encantaría poder hacerlo otra vez con otra persona pero por el momento no tengo nada planeado".