El reciclaje es una excelente manera de reducir el impacto ambiental y al mismo tiempo fomentar la creatividad. En esta nota, te mostramos cómo transformar cables viejos en cestas funcionales y decorativas para tu hogar.
El reciclaje es una excelente manera de reducir el impacto ambiental y al mismo tiempo fomentar la creatividad. En esta nota, te mostramos cómo transformar cables viejos en cestas funcionales y decorativas para tu hogar.
Este proyecto no solo es ecológico, sino también una forma práctica de darle una nueva vida a materiales que de otro modo podrían acabar en la basura.
A continuación, te explicamos el paso a paso y los materiales necesarios para crear tus propias cestas de cables reciclados.

Antes de comenzar, corta los cables viejos en segmentos de aproximadamente 20 a 30 centímetros de largo. Utiliza los alicates para hacer cortes precisos.
Asegúrate de retirar cualquier revestimiento de plástico si es necesario para evitar que interfiera con el proceso de tejido.
Decide el tamaño y la forma de la cesta que deseas crear. Puedes optar por una cesta redonda, cuadrada o rectangular, dependiendo de tus necesidades.
Usa la regla o cinta métrica para medir y planificar cuántos segmentos de cable necesitarás para la base y los laterales de la cesta.
Comienza a tejer la base de la cesta. Coloca los cables en la forma deseada para la base y únelos utilizando el hilo resistente.

Puedes usar una técnica de tejido en espiral o entrelazar los cables para formar una base sólida. Asegúrate de que los cables estén firmemente sujetos y que la base tenga el tamaño adecuado para tu diseño.
Una vez que tengas la base completa, comienza a construir los lados de la cesta. Continúa tejiendo los cables alrededor de la base, utilizando el mismo hilo resistente para unir cada fila.
Para formar las paredes de la cesta, agrega cables verticales a medida que avanzas. Asegúrate de mantener una tensión uniforme para que las paredes queden rectas y estables.
Cuando hayas alcanzado la altura deseada para los lados de la cesta, finaliza el tejido y asegúrate de que todas las uniones estén bien sujetas.
Puedes utilizar pegamento caliente para reforzar las áreas que consideres necesarias y asegurar que los cables permanezcan en su lugar. Si prefieres una opción más duradera, cose las uniones con hilo de coser para una mayor estabilidad.
Revisa la cesta y recorta cualquier cable sobrante que pueda sobresalir. Puedes agregar detalles decorativos si lo deseas, como asas hechas con más cables o adornos adicionales.
Asegúrate de que la cesta esté bien acabada y que no tenga bordes afilados que puedan causar accidentes.
