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Irgo, un pastor alemán de 10 años, viajó por error a Japón a bordo de un avión. En realidad, el perro tenía que ir a Kansas, Estados Unidos, pero la aerolínea cometió una equivocación garrafal y el canino terminó al otro lado del globo. Afortunadamente, Irgo pudo reencontrarse con su familia hace algunos días.
Los Swindle planearon su mundanza desde Oregon a Kansas esta semana. Prepararon todas sus pertenencias para viajar y se aseguraron que Irgo, su querida mascota, estuviera listo para subirse a un avión y emprender vuelo a su nuevo hogar. Pero por un error de la empresa United Airlines, el perro pisó suelo japonés, a más de 17.000 kilómetros de sus seres queridos.
Desesperada, la familia Swindle reclamó a la aerolínea. Era la primera vez que Irgo viajaba en avión y su edad avanzada, además de una infección en el oído, preocuparon a Kara y Joseph Swindle y a sus hijos. Según ellos, United Airlines ofreció llevar de regreso a Irgo en carga, pero no lo aceptaron y exigieron que volara en cabina.
Ante la presión, el jueves pasado, Irgo fue trasladado de Narita (Japón) a Wichita (Kansas) en un jet corporativo de United Airlines. El vuelo se prolongó durante más de 11 horas, pero Irgo lo soportó con éxito, seguramente expectante por volver a estar con sus dueños.
"Fueron lágrimas instantáneas", contaron los Swindle a la CNN, luego de reencontrarse con su perro. "¿Listo para ir a casa ahora?", le preguntó Joseph a Irgo mientras lo acariciaba con felicidad en el aeropuerto.
"Inmediatamente saltó y estaba llorando", dijo Kara Swindle en el momento en que se reunieron. "Cuando está súper emocionado, llora", detalló.