El presidente mantuvo un encuentro con sus ministros y funcionarios más cercanos, con la esperada ausencia de Victoria Villarruel, mientras se realiza la medida impulsada por la CGT.
Javier Milei convocó a su gabinete ante el inminente anuncio del FMI.
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Presidencia En el marco del paro nacional convocado por la CGT, el presidente Javier Milei encabezó una reunión de Gabinete en Casa Rosada. Mientras avanzaban las medidas gremiales que afectan trenes, subtes y Premetro -con colectivos funcionado-, el mandatario se mantuvo activo en redes sociales con publicaciones dirigidas contra los organizadores de la protesta.
Además del encuentro oficial, el Gobierno argentino lanzó una campaña en estaciones de trenes con el título “Ataque a la República”, en referencia directa a la medida gremial. Las redes sociales del jefe de Estado, por su parte, se convirtieron en un canal paralelo para reforzar su repudio al paro sindical.
La reunión se realizó en el Salón Eva Perón y contó con la presencia de Karina Milei (secretaria general de la Presidencia), Santiago Caputo (asesor y estratega), Manuel Adorni (vocero), Guillermo Francos (jefe de Gabinete) y los ministros Patricia Bullrich (Seguridad), Luis Petri (Defensa), Luis Caputo (Economía), Federico Sturzenegger (Desregulación del Estado), Sandra Pettovello (Capital Humano), Mariano Cúneo Libarona (Justicia) y Mario Lugones (Salud).
También participaron Martín Menem, titular de Diputados, y Santiago Bausili, presidente del Banco Central. No estuvo presente la vicepresidente Victoria Villarruel, quien desde 2023 no forma parte de este tipo de encuentros.
En paralelo, Milei intensificó su ofensiva contra la CGT desde su cuenta de X. Reposteó mensajes contra los líderes gremiales, a quienes sus seguidores tildaron de “sindigarcas”, “zurdos” y “sindicalistas KKs”. También reprodujo expresiones que cuestionaban la legitimidad de la medida y el rol de los sindicatos.
Uno de los mensajes que compartió fue el del diputado Damián Arabia, cercano a Patricia Bullrich, quien apuntó directamente contra los organizadores del paro, acusándolos de “chorros” y “estafadores contra sus afiliados” para hacerse millonarios.
En otros publicaciones, el mandatario republicó frases como “La Argentina debe ser el único lugar del mundo donde hacen huelga los que no laburan”, y acusó a la dirigencia gremial de intentar “promover un golpe” contra su gestión, que, según él, “está levantando al país”.
También amplificó las palabras del diputado Bertie Benegas Lynch, quien expresó que “un sindicato debe ofrecer servicios de representación en competencia” y que “hay que terminar con estos monopolistas repugnantes que usan a los laburantes de esclavos para pagar sus Audis y comer caviar”.