Policías salvaron la vida de un taxista que sufría un paro cardíaco en el Centro

Los dos efectivos se turnaron para practicarle RCP al chofer, que estaba inconsciente dentro del taxi. Una ambulancia lo llevó luego al hospital Central, donde se recuperó.

El oficial subayudante Sandro Herbas y la auxiliar Karina Guirardelli se convirtieron en héroes. Foto: Prensa Ministerio de Seguridad
El oficial subayudante Sandro Herbas y la auxiliar Karina Guirardelli se convirtieron en héroes. Foto: Prensa Ministerio de Seguridad

Dos bici-policías sumaron un acto heroico a sus carreras esta mañana en pleno centro de Mendoza. Le salvaron al vida a un taxista de 59 años que estaba sufriendo un paro cardiorrespiratorio en su auto.

Voceros de la Fuerza informaron que alrededor de las 9.30 de este viernes, la auxiliar Karina Guirardelli y su compañero, el oficial subayudante Sandro Herbas patrullaban el Centro en sus bicicletas, ya que prestan servicios en la Unidad Ciclista de Acción Rápida (UCAR) en comisaría Tercera.

De pronto fueron alertados por transeúntes que les pidieron ayuda ya que el chofer de un taxi estacionado sobre calle Lavalle 54 estaba en en aparente estado de inconsciencia, aunque sin lesiones externas visibles.

Pedaleando a toda velocidad, los uniformados llegaron al lugar y observaron que el taxista del aditamento 1174 yacía con débiles signos vitales ya que sufría un paro cardiorrespiratorio, según se informó oficialmente.

Los policías lo bajaron del vehículo, solicitaron por frecuencia una ambulancia del Servicio de Emergencias Coordinado y en la vereda el oficial Herbas comenzó a realizarle a la víctima masajes cardíacos RCP, intercambiando con su compañera, hasta que llegó la asistencia médica.

La profesional a cargo de la ambulancia 137 continuó con la asistencia al taxista mientras era ayudada en todo momento por los efectivos, hasta que el hombre pudo recobrar la conciencia y fue trasladado al hospital Central.

Minutos después desde ese centro asistencial comunicaron que el chofer, identificado como Daniel Ibáñez de 59 años, se encontraba recuperado de un paro cardiorrespiratorio y permanecía en observación.

Los uniformados volvieron a patrullar la calles céntricas con la satisfacción de haberle salvado la vida a un hombre por lo que, seguramente, serán reconocidos y condecorados en la Fuerza.

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