Este sábado 24 de mayo, habrá una movilización de familiares, amigos y vecinos del joven de 21 años que fue encontrado inconsciente a al costado de la Ruta 92, con una fractura de cráneo que lo dejó en coma inducido.
Nehemías Herrera
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La convocatoria es a las 14.30 en el Parque de Las Vías de Tunuyán, bajo una consigna contundente: que se sepa la verdad. “Queremos que aparezca el culpable o que, si alguien vio algo, lo diga. No puede ser que nadie haya visto a mi hijo tirado durante más de una hora. No estaba lejos de casa. Lo dejaron solo, y eso es lo que más duele”, expresó Nora Cabrera, madre de Nehemías.
La primera movilización había sido suspendida por el viento Zonda. Pero este sábado finalmente se realizará. La familia espera que los acompañen y que, si alguien tiene información, la aporte. “Si alguien lo chocó y no pudo evitarlo, bueno. Pero que se hubiera quedado. Que llamara a alguien. Lo dejaron solo, y eso no lo vamos a perdonar”, señaló Nora.
La noche del miércoles 8 de mayo, Nehemías Herrera regresaba en bicicleta a su casa por la Ruta 92, de Colonia Las Rosas hacia Tunuyán (Centro) luego de haber estado ayudando a un amigo a construir un techo. Pasada la medianoche, atendió una llamada de su padre. “Ya salgo, papá”, le dijo. Esa fue la última vez que su familia tuvo contacto con él.
Poco después, ya en la madrugada del jueves 9, fue hallado inconsciente al costado de la ruta. Lo encontraron tirado junto a su bicicleta, aproximadamente a siete u ocho cuadras de su casa, casi un kilómetro de distancia. “No faltaba nada para que llegara. Vivimos ahí nomás”, cuenta su madre, Nora Cabrera.
Fue la policía quien llegó a la casa con su DNI en la mano. “Lo encontraron inconsciente. No le habían robado nada”, cuenta. Nehemías vestía su ropa de trabajo: un mameluco, dos buzos y una campera, bien abrigado por el frío. En sus bolsillos estaban la billetera, las llaves de la casa y sus auriculares, solo faltaba el celular. “Si hubiera sido un robo, le hubieran quitado la bici, la billetera, pero no, él tenía todo”, insiste Nora.
Tras el hallazgo, fue trasladado en ambulancia al Hospital Regional Scaravelli. Desde allí, su familia fue notificada. “Nosotros pensamos que tenía un golpe nomás, porque estaba inconsciente, pero lo que sí se quejaba mucho”, recuerda su madre. Luego fue derivado al Hospital Central, en Mendoza, donde permanece internado en estado crítico. Según comenta la madre, los médicos les confirmaron una fractura de cráneo del lado derecho y múltiples hematomas.
La familia continúa preguntándose: “Estuvo más de una hora ahí, en la ruta, y ¿nadie se detuvo? ¿Nadie llamó? Desde aquel momento, su padre, Oscar Herrera, permanece a su lado en el hospital. Nora, en casa, cuida a los otros cuatro hijos.
Nehemías Herrera tiene 21 años y es el mayor de cinco hermanos. Vive con su familia y trabajaba en un taller mecánico. Es un joven activo y querido entre sus pares, conocido por su participación en equipos de vóley. “Nos sorprendió la cantidad de gente que lo quiere. Sus compañeros, los amigos del barrio, excompañeros del secundario, gente de La Consulta (San Carlos). Todos están colaborando con rifas, colectas, cadenas de oración. Incluso en su trabajo anterior están haciendo cosas por él”, cuenta su madre. “Esta marcha nace de ellos, de su amor”.
“Nosotros no sabíamos que era tan querido. Eso te da fuerza. Eso, y los médicos, que nos dicen que es fuerte, que es sano, que eso le puede jugar a favor”, remarca su mamá.