Walter Hilbing: “nuestro proyecto tiene 20 años y recién ahora está llegando a su madurez”

La destilería de Luján de Cuyo acaba de recibir un reconocimiento por su Gin. En medio de la pandemia prepara un servicio de take away con cóctel tirado para eventos sin salir de casa.

Walter Hilbing comanda junto a su padre, Rolando, la destilería mendocina Hilbing Franke Distillery.
Walter Hilbing comanda junto a su padre, Rolando, la destilería mendocina Hilbing Franke Distillery.

La época de cuarentena que demandó la pandemia en el mundo, sin dudas, quedará marcada en la historia de Hilbing Franke Distillery, la destilería mendocina comandada por Rolando y Walter Hilbing –padre e hijo, creadores de la grapa Aniapa y el gin que lleva el mismo apellido como marca, entre otros productos-.

Es que ese momento coincidió con algunas buenas noticias que llegaron a la empresa, a pesar de la difícil situación económica que trajo aparejada la pausa por la pandemia y que afectó a todos. Vamos por parte.

Al mismo tiempo de la presentación al mercado de su primer gin tipo London Dry –categoría más conocida y consumida de esta bebida-, la destilería de Luján de Cuyo recibe una medalla de bronce por este mismo producto, en el concurso internacional Destillata (ver aparte) y además, abre su propia tienda online, con entrega a domicilio y precios promocionales.

En charla con Fincas, Walter Hilbing, presidente del emprendimiento local, repasó la historia familiar ligada a la vitivinicultura y a los destilados, el abc para lograr un gin de calidad y los proyectos que pondrá en marcha en breve, entre otros temas.

-¿Cómo surge la idea de emprender el camino de los destilados? ¿Existe una tradición familiar o fue un proyecto que se originó allí?

-Desde 1870 aproximadamente, mi familia está dedicada a la elaboración de bebidas alcohólicas. Mi tatarabuelo, Pablo Loos, doctor en Ciencias Naturales, fundó con Michel Aimé Pouget la Quinta Agronómica en Mendoza. Fue una de sus hijas la que se casó con el primer Hilbing que llegó a la provincia y que tenía, en la primera década del 1900, 400 hectáreas de malbec en La Consulta (San Carlos). Por otro lado, mi bisabuelo y abuelo de mi padre, fue el primer maestro cervecero de Mendoza y puso en marcha la cervecería Andes. Entonces, una de sus dos hijas, se casa con el hijo de aquel viñatero del Valle de Uco, y de esa unión, nace mi padre, quien se recibió de enólogo y viaja a Alemania a estudiar una especialización en la materia. Luego, en 2000, obtiene una maestría en Destilación. En 2002, yo me gradúo de ingeniero en Electrónica, y ese mismo año armamos una destilería garaje en Guaymallén.

-¿Cómo fue el salto de esta destilería tipo boutique a la que existe hoy en Luján desde donde elaboran sus productos?

-Fue un salto importante. De pocos metros, pasamos a tener 600 metros cuadrados; de 2 alambiques, pasamos a tener 4 y de vender cerca de 3.000 a 4.000 botellas, en la actualidad vendemos 80.000 aproximadamente, entre todas nuestras etiquetas. De esa cantidad, el 40% se destina al mercado interno, y el otro 60%, al externo, principalmente a Alemania, España, Holanda, Inglaterra, Estados Unidos, Canadá y, próximamente, Colombia.

-Considerando que el gin que elaboran es el producto estrella de la destilería, ¿cuáles son esos aspectos que creés importantes para un producto de alta calidad?

-Fundamentalmente, el conocimiento profundo del área. No somos improvisados y eso es algo que nos distingue. Usamos, también, alambiques 100 por ciento de cobre, lo que significa que contamos con equipos de última generación para obtener la más alta calidad en el resultado. Por último, la materia prima fresca es otro rasgo distintivo. No usamos esencias y elaboramos según el método antiguo que conlleva un proceso lento y, por lo tanto, los resultados se ven lentamente. Por algo, éste es un proyecto que ya tiene 20 años y que recién ahora está llegando a su madurez.

-Y lanzando su tienda online, que no es poco…

Exacto. El lanzamiento del nuevo London Dry coincide con la apertura de nuestra tienda online –www.hfdisillery.com.ar-. Desde el año pasado, veníamos ofreciendo este servicio y trabajando en el tema. En esta época de cuarentena se juntó todo. Este año, el servicio se potenció con la pandemia.

-¿Han visto una mejora en las ventas a través del comercio digital?

Sí. Comparando la segunda mitad de 2019 con la primera mitad de 2020, hemos vendido el triple. Ofrecemos algo interesante que es la posibilidad de adquirir desde una sola botella. Esto es algo muy valorado por el amante de las bebidas espirituosas.

Con una distribución inicial que cubre diez provincias del país, ya se pueden comprar todas las bebidas que forman parte de su portfolio, con entrega gratuita para compras superiores a dos unidades.

-En esta etapa en la que tantas empresas se han reiventando con nuevos servicios y productos, ¿ustedes están planificando algo nuevo?

-Sí. Estamos desarrollando algo nuevo a la espera de la habilitación de eventos sociales para 30 o 40 personas. La idea es poder ofrecer una caja que contiene un mini barril –de siete litros de capacidad- con un cóctel tipo tirado para servir en casa. El box incluirá vasos y hielera. Se ofrecerá a través de nuestro sitio web y funcionará como servicio take away.

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