Liberaron a Roxana Carabajal tras ser arrestada por defender a chicos acusados de romper la cuarentena

Roxana Carabajal y la bailarina Sandra Farías recuperaron la libertad tras permanecer detenidas desde el lunes por “atentado y resistencia a la autoridad” después de impedir que un grupo de jóvenes fueran también detenidos por no respetar la cuarentena ni las medidas sanitarias impuestas por el Gobierno.

De acuerdo con lo que informa Nuevo Diario, en horas del mediodía el Fiscal Sebastián Robles, designado para los casos de violación a las medidas dispuestas para evitar la propagación del coronavirus, indagó a las folcloristas Roxana Carabajal y Sandra Farías, tras lo cual decidió concederles la libertad, imponiéndoles medidas restrictivas.

Las mujeres, que fueron asistidas por la Dra. Adriana Bóbboli, integrante del Ministerio Público de la Defensa, se abstuvieron de declarar ante el fiscal. Ambas quedaron imputadas por los delitos de atentado y resistencia a la autoridad, amenazas y lesiones.

El hecho tuvo lugar en el barrio Mariano Moreno mientras efectivos les informaron a tres jóvenes que jugaban al fútbol sin barbijos -en la puerta de la casa de la cantante- que violaban las medidas sanitarias y debían acompañarlos. En ese momento entraron en escena Roxana Carabajal y Sandra Farías, madrastra de uno de los jóvenes detenidos, Nazareno Saavedra. “¡En la puerta de su casa están, loco! ¡No digan pelotudeces! ¡No es la vía pública, es la puerta de su casa!”, argumentó la cantante de 47 años a los gritos, además de asegurarle a la policía que no se iban a separar de los chicos. 

Ambas mujeres se enfrentaron con la policía a los gritos, empujones y patadas, y terminaron siendo detenidas por "atentado y resistencia a la autoridad".

En diálogo con TN, el fiscal Robles dijo: “Los jóvenes iban a quedar en libertad, se les iba a imputar por la violación a las medidas sanitarias, pero ingresaron las dos mujeres de manera violenta y agredieron al personal policial”, agregó, y explicó que los efectivos “trataron de calmarlas”, pero ellas “hicieron caso omiso al pedido por parte de la policía”.