Mendoza es la cuarta economía en el país, pero la 17° en salarios

El sueldo promedio de los trabajadores en relación de dependencia es similar al que tienen los empleados en provincias con menor participación en el PBI, como Salta y Chaco.

De acuerdo al Ministerio de Trabajo de la Nación, los empleados del sector comercial de la provincia ganan $1.613 por debajo del promedio de todas las actividades. / Orlando Pelichotti
De acuerdo al Ministerio de Trabajo de la Nación, los empleados del sector comercial de la provincia ganan $1.613 por debajo del promedio de todas las actividades. / Orlando Pelichotti

Aunque se suele incluir a Mendoza entre las provincias más importantes en el país en términos económicos, lo cierto es que, cuando se toma en consideración el salario promedio de los trabajadores privados, se encuentra en una situación similar a la del NEA o el NOA. Por otra parte, se ubica entre las que menos aumento tuvieron en el último año, con apenas un 31% de incremento anual.

Mendoza ocupa el 17° lugar en lo que a remuneraciones se refiere (desde la más alta a la más baja), del total de 23 provincias más Ciudad Autónoma y Gran Buenos Aires. Si bien es la cuarta provincia con más participación en el Producto Bruto Interno (3,9%), detrás de Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba, su ingreso promedio bruto de $46.002 (antes de descuentos jubilatorios) se encuentra bastante lejos de lo que ganan los empleados del sector privado en esas provincias: tienen sueldos de $56.723, $54.720 y $49.528 respectivamente; y más de $10 mil por debajo de la media nacional de $57.383.

De hecho, los asalariados privados mendocinos perciben sueldos apenas mejores que los de Salta (promedio bruto de $ 45.809), Chaco ($ 42.892) y Corrientes ($ 42.650), provincias cuya participación en la economía nacional oscila entre el 1,3% y 1,7% (menos de la mitad de Mendoza). Los datos surgen del Boletín de Remuneraciones de los Trabajadores Registrados, que elabora el Observatorio de Empleo y Dinámica Empresarial, del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación. Aunque los últimos valores disponibles corresponden a junio, se tomó como referencia el salario de mayo, ya que el del sexto mes incluye el aguinaldo.

Subas por debajo del promedio

Otro número que ubica a Mendoza en una situación complicada es el aumento medio en el último año (entre mayo de 2019 y el mismo mes de 2020). En la provincia fue de apenas 31%, mientras el promedio nacional fue de 41%, lo que deja a los asalariados con casi 12 puntos de pérdida de poder adquisitivo frente a la inflación. Es que el Índice de Precios al Consumidor tuvo, en el mismo período, según la DEIE (Dirección de Estadísticas e Investigaciones Económicas de la provincia), una variación de 42,9%.

En este “ranking”, Mendoza está en el puesto 19 y sólo tuvieron un incremento menor, en el último año, Neuquén (5%), donde la remuneración promedio es de $75.945; Chubut (16%), donde los asalariados privados cobran una media de $82.536; Santa Cruz (20% / $97.833); Tierra del Fuego (23% / $73.244); y Río Negro (27% / $53.771).

El escenario desfavorable

El economista José Vargas, de la consultora Evaluecon, explicó que la situación de Mendoza se vincula a su matriz productiva. “Provincias como Córdoba o Santa Fe parecen similares a Mendoza, pero tienen una matriz más diversificada, mientras que la mendocina es muy acotada, con una gran infla del couencimercio, el turismo y la vitivinicultura”, indicó.

De hecho, en el informe del Ministerio de Trabajo se consigna que el sueldo promedio en la agricultura y ganadería en Mendoza es de $27.895; en hotelería y gastronomía, de $23.834 y en comercio de $44.389. También el rubro de la construcción se encuentra por debajo de la media, con un valor de $41.607; el de servicios inmobiliarios, empresariales y de alquiler, con $38.490; y el de enseñanza, con $27.520.

Esta situación, planteó Vargas, nos deja más cerca de las provincias del norte en lo que a salarios promedio se refiere, al tiempo que nos aleja de las que deberían ser parecidas. Esto también determina que Mendoza haya ido perdiendo participación en el PBI.

El economista agregó que el año pasado fue muy negativo para el mercado laboral de la provincia. Además, resaltó que los datos corresponden al sector privado formal, pero el impacto de la crisis es mucho mayor en el informal y en los autónomos, ya que la pandemia terminó de comprometer a numerosos sectores.

Según un informe publicado por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec), la desocupación del Gran Mendoza fue del 15,6% en el segundo trimestre del año; un índice que supera por 6,5 puntos porcentuales el resultado registrado en igual período de 2019. Es, además, el peor resultado de los últimos 16 años, de acuerdo a los registros de la Dirección de Estadísticas e Investigaciones Económicas de Mendoza (DEIE).

Paula Pía Ariet, de Gestión Consultores, señaló que para entender estas cifras se debe analizar qué tipo de convenio laboral tienen otras provincias y en qué sectores se desempeña la mayoría de los trabajadores mendocinos. Así, en las del sur hay gran cantidad de empleados en el sector petrolero y en Buenos Aires, Córdoba o Santa Fe, en el campo. En ambos casos, indicó, se trata de salarios por encima del promedio de los de Mendoza.

Es que, aunque en la provincia hay muchos convenios nacionales, también hay una gran cantidad de trabajadores vitivinícolas y agrícolas, con sueldos muy bajos. Si bien el petróleo explica una parte importante de los ingresos de Mendoza, la masa salarial en el sector es acotada.

Aún más, planteó Ariet, el ingreso de los trabajadores informales en la provincia es inferior al de otras partes del país, lo que también explica que la pobreza esté unos puntos por encima de la nacional (41,5% en el Gran Mendoza y 40,9% en la media nacional en el primer semestre de 2020). Como la inflación no se aleja demasiado de la media de Argentina, también implica que los mendocinos han sufrido una mayor pérdida de poder adquisitivo.

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