River superó 3 a 1 al Urawa Red Diamonds de Japón, en el Lumen Field Stadium de Seattle, por la fecha 1 del Mundial de Clubes.
River - Urawa Red Diamonds
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River Plate River Plate jugó un partido discreto, que le alcanzó para superar sin demasiados inconvenientes al Urawa Red Diamonds de Japón por 3 a 1 en el marco de la fecha 1 del Mundial de Clubes de la FIFA. El equipo de Marcelo Gallardo quedó cerca de clasificar a octavos, lo que puede concretar el próximo sábado.
El primer tiempo del Millonario fue de mayor a menor, decayendo en gran medida su nivel. Había empezado mostrándose muy superior al conjunto japonés, con dominio en campo contrario y una chance concreta de peligro, cuando Sebastián Driussi controló y giró con clase y sacó un disparo cruzado que se estrelló en el palo.
A los 11’, esa superioridad se trasladó al marcador. Franco Mastantuono condujo y conectó con Acuña, que tiró un gran centro para el cabezazo de Facundo Colidio, decretando de esa forma el 1 a 0.
A pesar de estar abajo en el tanteador, Urawa no se despegó de su plan y siguió cumpliéndolo a la perfección. Bien plantado contra su arquero, apretó en tres cuartos de campo propio, y dejó que River mantenga la pelota con mucha posesión de sus defensores centrales. Cuando la recuperó, fue rápido para desplegarse en la contra, pero le faltó creatividad.
En cuanto a las chances para la igualdad, sólo se destacó un remate de Takuro tras cerrarse de afuera hacia el centro que contuvo Armani sin problemas. Ese trámite bien planchado y aburrido le convino a los nipones, que secaron ofensivamente a River.
Entendiendo que debía mejorar el mediocampo, y dotarlo de más dinámica, Marcelo Gallardo decidió en el entretiempo sacar a Enzo Pérez y Nacho Fernández y mandar a la cancha a Giuliano Galoppo y Maximiliano Meza.
Sin embargo, no tenía previsto que a los dos minutos el Urawa regale el segundo tanto. Hoibraten quiso bajarle la pelota al arquero de cabeza, y en el medio se interpuso Sebastián Driussi para mandarla al fondo de la red y luego lesionarse el tobillo al pisar mal.
Las malas noticias no quedaron allí, ya que rápidamente llegó el descuento oriental. Gustafson desequilibró y tocó para Takuro, que quiso encararlo a Acuña y fue chocado en el intento. Claro penal que Yusuke cambió por gol desde los doce pasos.
El descuento de los Red Diamons dio paso a unos cuantos minutos plagados de dudas para el Millonario, que perdió ímpetu y pareció complicarse demasiado. De todas formas, su rival nunca demostró más armas que las ganas y el orden y no pudo complicarlo con chances de peligro para el empate.
Probablemente cuando más lejos parecía estar, el elenco de Gallardo pegó de nuevo. Acuña ejecutó un buen córner, y Maximiliano Meza anticipó en las alturas para darle un enorme baño de tranquilidad al equipo, enterrando el espíritu de un disciplinado y duro contrincante. El propio lateral por izquierda generó otra oportunidad de oro, cuando llegó hasta el fondo, y centró para el cabezazo apenas desviado de Mastantuono.
Finalmente el debut de River en el máximo torneo de clubes del mundo fue con alegría, lo que le dio además la tranquilidad necesaria para afrontar el duelo que puede dejarlo clasificado para los octavos de final: el sábado a las 22 horas de nuestro país enfrentará al Monterrey, con el boleto a la siguiente instancia entre ceja y ceja.