Kanya Sesser no es la típica modelo de revistas, esta tailandesa no cumple con los estándares de belleza impuestos por el mundo de la moda y está feliz de hacer una diferencia.
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Kanya Sesser no es la típica modelo de revistas, esta tailandesa no cumple con los estándares de belleza impuestos por el mundo de la moda y está feliz de hacer una diferencia.
Su historia es por demás inspiradora, ya que la bella modelo nos sólo supo sortear los obstáculos físicos que le impuso la naturaleza, sino que además superó los prejuicios de los que fueron partícipes incluso sus padres.
Según informó el portal de noticias CNN en español, Kanya Sesser nació sin piernas y debido a esto fue abandonada por sus padres en la entrada de un templo budista, donde la cuidaron por un año.
Al cumplir los 5 años, la pequeña Kanya fue adoptada y se fue a vivir a Portland, Oregon, donde desarrolló su pasión por el patinaje, la escalada y el surf.
Con el tiempo, Sesser se convirtió en una hermosa mujer caracterizada por su particular belleza. Hoy a sus 26 años es modelo de ropa interior, actriz y atleta.
"Desde muy pequeña, mi enfoque en la vida es vivirla sin límites y no temer a hacer cosas nuevas", escribió en una para Billabong. "Aunque hay ciertas cosas que quizá no pueda hacer, eso no me impide intentar hallar la forma de hacerlo a mi manera".