Carlo Di Domenico, su legado detrás del éxito

Su estilo barroco, entre tintes de Versace y Armani, lo posicionó con un sello inconfundible que lo convirtió en el favorito de las divas.

Carlo Di Domenico, su legado detrás del éxito
Carlo Di Domenico, su legado detrás del éxito

Ayer el mundo del espectáculo se enteraba de la muerte de un icónico referente de la moda y el diseño de los '90 hasta la actualidad.

Se trata de Carlo Di Domenico, el hombre que creó una carrera vistiendo no sólo las tops del momento, sino a personajes como Susana Giménez, Mirtha Legrand, Graciela Borges y Teté Coustarot (sólo por nombrar un puñado de personalidades).

El diseñador (oriundo de Mar del Plata) estuvo casado con Susana Ortiz (diseñadora en su momento de Cristina Kirchner), con quien comenzó a transitar el mundo de la moda en alta costura, prêt-à-porter y alta noche.

De su matrimonio con Ortiz tuvo dos hijos (Stefano y Carla) y, pasado el tiempo, llegó la separación.

Carlo rehizo su vida junto a otro diseñador, César Juricich, con quien fue socio y pareja por un lapso de 13 años. Ellos terminaron enfrentados y llegaron a los Tribunales por cuestiones comerciales. Nunca más volvieron a hablar.

Tal fue el distanciamiento que Juricich desconocía la situación de salud de su expareja; que padecía depresión y leucemia.

Así lo contaba a los medios ayer:  "Si bien hacía ocho años que ya estaba separado de Carlo, que muera mi expareja, mi exsocio, alguien con quien estuve tantos años, la verdad que me shockeó, pero... tremendamente. Más sin saber que estaba enfermo de leucemia y con una gran depresión. Me da muchísimo dolor".

Entre Versace y Armani 

Lejos de un estilo lánguido y atomizado, Carlo Di Domenico no pasaba desapercibido a la hora de crear, ni de vestirse. Incluso muchos veían en su estilo una mezcla entre Versace y Armani con toques orientales de Elie Saab.

Quizá esto se deba a sus raíces italianas, por parte de su padre, y libanesas por parte de su madre.

Su trabajo constante no sólo le valió la posibilidad de vestir a grandes divas argentinas, y modelos tops (Mirtha Legrand, Susana Giménez, Graciela Borges, Teté Coustarot, Nequi Galotti, Anamá Ferreira, Evelyn Scheidl, Ingrid Grudke, Karina Mazzocco, Adriana Costantini, Mariana Arias) sino la amistad de Héctor Vidal Rivas y Ricardo Piñeyro. También llegó a ser nominado "Diseñador Avant Garde" por la revista Vogue. 

A nivel nacional participó en las ediciones invierno/verano del Baf Week en el período 2000-2010. En dos oportunidades obtuvo el premio “Tijera de Plata, Diseño con identidad propia”, otorgado por la Cámara Argentina de la Moda.

“Estoy muy feliz con todo lo hecho, pasaron estos años muy rápido como un sueño cumplido pero a la vez siento que estoy comenzando. He pasado mi vida en una maleta, viajando para inspirarme y traer cosas bellas a mi país. Soy un autodidacta de la moda, la llevo en mi ADN”, confesaba Di Domenico en el festejo por sus 40 años en la moda.

“Mis genes son italianos, crecí y me desarrollé en Europa. Siempre digo que si hubiera nacido en Italia, hubiera sido un Armani perfectamente”, se autodefinía el diseñador.

Pero Carlo no se limitó a su círculo de celebridades, sino que también amplió la jugada y formó incluso parte del panel de "La Jaula de la Moda", conducido por Horacio Cabak.

Carla y Stefano, sus hijos, llevan la moda en la sangre y decidieron continuar sus propios caminos con la marca de ropa SC Di Domenico, mientras aún vivía su padre.

Un legado que seguramente no tendrá fin.

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