A 17 años y 6 meses de prisión fue condenando el quiosquero Gerardo Godoy por el asesinato Esteban Palombarini, ocurrido el pasado 25 de junio pasado en Ciudad en un comercio.
Godoy se sometió hoy a un juicio abreviado a cargo de la Jueza Erica Sánchez en la sala 23 del Polo Judicial Penal, donde aceptó haber causado la muerte de Palombarini, de el “Plancha” tras efectuarle tres disparos.
La fiscalía, representada por el fiscal Carlos Torres encuadró penalmente la imputación de Godoy como homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego. Asesorado por el defensor Carlos Sebastián Gijón, Godoy aceptó los términos de la acusación y escuchó su sentencia en la misma audiencia. La querellante Jimena Villanueva, representó a los familiares de la víctima que aceptaron el trato.
El crimen se produjo en calle Vendimiadores al 635, casi esquina Perú de Capital, en un quiosco. “Plancha”, como lo conocían los vecinos y amigos pidió fiada una cerveza, luego de venir de un festejo familiar. Ese fue el punto de conflicto, ya que el comerciante no accedió al pedido y hubo una discusión tras la cual Palombarini terminó muerto.
El encargado del local le disparó con una pistola marca Bersa que fue entregada a la policía para las pericias pertinentes. Además, se pidió apoyo al personal de Delitos Tecnológicos, debido a que en el domicilio hay cámaras de seguridad.
Godoy ya fue imputado por homicidio agravado por el uso de arma de fuego y quedó detenido desde el fatídico sábado por la noche en una dependencia judicial.
El fiscal Torres dispuso la imputación de Godoy, tras revisar los videos de seguridad del comercio, donde se ve toda la secuencia de la discusión y el crimen. Allí, queda en evidencia que en ningún momento Palombarini intentó robar o cometer un asalto en el comercio, como dijo inicialmente el acusado.
Los amigos de la víctima dejaron en claro en su declaración ante el fiscal que Godoy tenía problemas previos con Palombarini y ya lo había amenazado con su arma. Los vecinos del lugar también fueron contundentes al señalar que el imputado por el asesinato ya había tenido problemas y peleas con otros vecinos.