Pocas horas de viaje, amplio rango de precios en alternativas de alojamiento, movida nocturna. . . , sólo algunas de las cualidades que mencionan los que por estos días se están decidiendo a pasar sus vacaciones de verano en Villa Carlos Paz.
Es innegable que este punto mediterráneo se ha situado en lo más alto del podio de los destinos estivales y muchos mendocinos cada temporada se aprestan para aprovechar todas sus beldades serranas. Promediando diciembre la ciudad se prepara para la temporada y trabaja en la ejecución de una serie de obras de interés turístico que renovarán la imagen de la perla del Valle de Punilla. La construcción de un puente sobre el lago San Roque (Variante Costa Azul) que convertirá a la zona en un paseo turístico, con vistas panorámicas a las sierras y al lago, la ampliación de la costanera con una continuidad en su sector norte y un nuevo puente peatonal, constituyen la apuesta local para los próximos meses.
La movida teatral
Luces, grandes carteleras, muchos famosos y más mediáticos, se incluyen dentro del combo teatral que sin dudas seduce a más de uno. Ya es un clásico de Carlos Paz que los turistas se ocupen desde el primer día de estadía de elegir cuáles obras presenciarán durante sus vacaciones. Desde el municipio se jactan indicando que la ciudad ha obtenido recaudaciones récords y se ha convertido en la primera plaza teatral del verano. Para la temporada 2017 ya están confirmados 30 elencos.
En el teatro Luxor se presentará “Mahatma”, el musical de Flavio Mendoza. En el Candilejas I estará Nicolás Cabré y elenco con “El quilombero”. En el Teatro Holiday I, “Abracadabra”; una comedia con Pedro Alfonso, Tomás Fonzi, Fredy Villarreal y demás figuras que han pasado por el Bailando. Pablo Alarcón, Graciela Alfano, Fabián Gianola, Claribel Medina, Silvia Montanari, Betiana Blum, Rodolfo Ranni, Flor de la V, Carmen Barbieri y Fátima Flórez otros de los artistas que pisarán las tablas entre diciembre y marzo. Las entradas saldrán entre $ 250 y $ 500. Otra salida nocturna puede ser ir a una confitería bailable, en ese caso, el precio de la entrada ronda los $ 150.
Calculadora en mano
En algunas situaciones no es bueno reproducir estereotipos. Pero para el caso del turista de clase media, que suele vacacionar en verano – justo cuando le toca la licencia anual- no se interpreta mal, e indefectiblemente tiene la calculadora en la mano. Para ellos, entonces, los precios estimativos de los principales productos y servicios requeridos durante los días de descanso.
En primera instancia, el alojamiento. Los hoteles 1 estrella costarán en promedio $ 876 (doble) y $ 1.430 (cuádruple). 2 estrellas: $ 1.107 (doble) y $ 1.611 (cuádruple). 3 estrellas: $ 1.743 (doble) y $ 2.300 (cuádruple). 4 estrellas: $ 2.129 (doble) y $ 2.885 (cuádruple). En tanto las cabañas en base doble con desayuno por día saldrán $ 1.322 (base doble) y $ 1.688 (base cuádruple). Las tarifas sugeridas por la Asociación Inmobiliaria marcan los siguientes números. Departamentos mono ambientes (por persona) desde $ 230. Para 2 o más dormitorios desde $ 250 por persona. En los caso de contar con parrilla, pileta, cochera, aire acondicionado, ventiladores, etc. el precio se incrementa un 30% o 35% por persona y alcanzan los $ 700. Por su parte, los chalets de 2 dormitorios costarán a partir de $ 1.050.
Pasarla bien no tiene precio
Bueno, más allá de lo metafórico de este título, en Carlos Paz hay muchas alternativas para divertirse, pero lamentablemente, tienen precio. Veamos:
Una vueltita en la emocionante aerosilla $ 200; la alfombra $ 70; tirolesa $ 300; arquería $ 100, entrada al serpentario y expoacuario $ 100. El parque temático Pekos es un clásico y ningún niño-en realidad tampoco los adultos- se lo quiere perder. La entrada cuesta $ 500 y los menores de 5 años $ 200; no es barata, pero son varias horas de diversión asegurada. La entrada a la casa de Casper, donde la gravedad parece no existir, sale $ 60 los niños y $ 90 los adultos. Una excursión lacustre $ 200 y las cabalgatas $ 280 por hora. En la villa y sus inmediaciones se pueden alquilar bicis ($ 50 la hora o $ 150 el día) o hidropedales ($ 50 por persona) para pasarla muy bien.
Salir a comer, es también una manera de disfrutar. En ese marco, sentarse a degustar una parrillada, en la avenida principal por ejemplo, tendrá un costo de un poco más de $ 300 para dos. Los lomos $ 90; las pizzas $ 130, un desayuno $ 50; un helado $ 20 y el menú turista $ 95. Entre $ 350 y $ 550 será el valor de las excursiones a sitios de interés turístico de los alrededores tales como Los Cocos- Capilla del Monte; Dique San Roque-Río Ceballos; Alta Gracia-La Cumbrecita; Los Túneles-Mina Clavero; entre otras.
Muchos eventos
El telón de la temporada se correrá oficialmente el 22 de diciembre en los jardines municipales con la presentación de Marcela Morelos; ése será sólo el punto de partida porque los eventos continuarán. Así, el nuevo año será recibido con un show de fuegos artificiales en la Costanera del lago San Roque. Una semana después, el 7 de enero será el Carlos Paz Night Trail. 5, 10 y 21 k. en el Parque Temático Costa Azul. Para el 14 está prevista la fiesta de deportes extremos Córdoba X. En materia de grandes recitales, hay que decir que se presentarán el 9 de enero Jorge Rojas (en el Teatro Luxor) y el Chaqueño Palavecino (en el complejo Malambo). El 16 será el turno de Carlos Baute (en el Luxor). El recital Coca Cola In Concert tendrá lugar el 23 de enero en Costanera del Lago.
Febrero también tiene lo suyo, porque el 5 será el Carlos Paz Corre, Maratón 10 k. por la Costanera. Y la esperada entrega de los premios Carlos será el 6 en los Jardines Municipales.
Santa escapada
Ya es una constante, desde octubre y también en los meses previos, la concurrencia de peregrinos que visitan la Villa Cura Brochero. Este verano, probablemente, los que vacacionen en Carlos Paz tengan tiempo para una escapadita hasta ese destino para encontrarse con las reliquias del Santo Argentino.
A la belleza del entorno serrano, hay que agregarle la emoción de andar por esas tierras, especialmente para los creyentes. En la oficina turística ofrecen el mapa con las principales paradas. La iglesia –Santuario de Nuestra Señora del Tránsito y Santo Cura Brochero-, la principal. Allí espera una estatua en tamaño natural, tan real parece, que convoca las miradas devotas. Mientras que en una de las naves laterales se exhibe la reliquia del cerebro incorrupto, fotos y flashes para los que no lo pueden creer; oraciones, pedidos y agradecimientos para los que saben que los milagros existen.
Antes de salir, los fieles pasan por la santería para llevarse una estampita o algún otro recuerdo. Marketing dicen algunos, los fieles no lo entienden así y hacen sin fastidio la fila, que suele ser larga. Todo vale para rezar la oración con licencia eclesiástica que ofrece la oportunidad de interceder por una gracia especial. “Es que está haciendo muchos milagros” dicen en voz baja para no molestar a los que no cesan de rezar. La vuelta se completa con una pasadita por la casa de la hermana de José Gabriel del Rosario – a una cuadra de la plaza-. Allí fue donde murió y donde se pueden ver algunos de los objetos que le pertenecieron, como un Cristo de grandes dimensiones ante el cual solía hincarse a rezar. Tanto lo hizo durante su vida que se le deformaron las rodillas, tal como se pudo saber cuando exhumaron su cuerpo.
Otros huesos que llamaron la atención de los expertos fueron los de sus caderas. Parecían los de una mujer -deformados por embarazos-. Pero no, eran los del santito que de tanto montar su burro para atender necesidades de los pobres en las serranías, quedaron así.