Al menos diez personas murieron en la capital de Afganistán, Kabul, y las ciudades de Mazar-e-Sharif y Sardawar, este jueves 21 de abril, en múltiples explosiones que interrumpieron la relativa paz que disfrutaba el país. Según el medio local Tolo News, otras 85 personas más resultaron heridas en los diversos ataques, pero es probable que la cifra aumente. La primera explosión del día tuvo lugar en Kabul e hirió a dos niños. Más tarde, al menos cinco personas murieron y 65 resultaron heridas en una explosión que se presentó en la mezquita Seh Dokan, ubicada en una zona concurrida de Mazar-e-Sharif.
Funcionarios del hospital del distrito de Abu Ali Sina Balkhi de la ciudad anunciaron que decenas de heridos están siendo tratados en sus instalaciones. Más tarde, el portavoz de la Policía de la provincia de Kunduz, Qari Obaidullah Abedi, señaló que al menos cuatro personas murieron y 18 resultaron heridas en una explosión en Sardawar, una provincia al norte del país.
Al menos seis personas murieron y otras 11 resultaron heridas después del reporte de dos explosiones en una escuela de niños en un barrio chiíta de Kabul el martes, según informó un funcionario del Gobierno interino liderado por los talibanes. Las explosiones ocurrieron cuando los estudiantes salían de sus clases matutinas. Otra explosión ocurrió ese mismo día cerca del Centro Educativo Mumtaz a varios kilómet
ros de distancia.
Las múltiples explosiones dirigidas a los civiles en Afganistán, gobernado por una administración interina talibán, generan preocupaciones tras meses de relativa paz, ya que la situación de seguridad había mejorado con la llegada del nuevo Gobierno en agosto pasado, según los informes de la ONU.