Lautaro Martínez y Agustina Gandolfo se casaron en Italia, a pocos meses del nacimiento de su segundo hijo. El jugador de fútbol y la influencer mendocina dieron el “sí, quiero” acompañados de sus amigos, familia y de parte del plantel de la Selección Argentina, los campeones del mundo.
El futbolista y su pareja, madre de sus hijos, se casaron por civil en Italia, donde residen desde hace varios años por el trabajo de Martínez en el Inter de Milán.
Aunque trascendió que luego realizarán otro casamiento, la unión por iglesia, con una gran fiesta que están organizando en Argentina, para poder compartir con sus allegados que no pudieron viajar para estar con ellos en el festejo en Europa.
A los novios los acompañaron en este día especial parte del plantel de la Selección Argentina con sus parejas. Dijeron presente el Dibu Martínez, Enzo Fernández, Joaquín Correa, Alexis Mc Allister, Nicolás Tagliafico, Nicolás González y Genónimo Rulli. En las fotos, no se lo vio a Lionel Messi, por lo que no habría asistido a la boda del delantero.
Los detalles de la gran boda de Lautaro Martínez y Agustina Gandolfo
El pasado 14 de febrero, Día de los Enamorados, Agustina y Lautaro se comprometieron y lo anunciaron a lo grande con un emotivo y romántico video que la mendocina compartió en sus redes sociales, a pocos días de haber hecho pública la noticia de su embarazo.
En sus redes, Gandolfo mantuvo al tanto a sus seguidores de los preparativos de su casamiento, pero sin dar mucho datos de fechas y lugares. Sin embargo, días atrás mostró que sus hermanas y amigas íntimas le organizaron una despedida de soltera.
Finalmente, este lunes 29 de mayo celebraron su unión civil, la primera parte de su casamiento. Ya que tienen planeado hacer otro en Argentina, quizás después de que nazca su bebé.
La gran fiesta tuvo lugar a orillas del Lago Di Como, en el norte de Italia, y estuvieron en todos los detalles. El civil fue en los jardines del lugar, con una vista soñada a un enorme castillo, como en los cuentos de hadas y su hija, Nina, fue quien les llevó los anillos.
Luego, pasaron al salón donde los esperaban sus invitados sentados en largas mesas donde cada uno contaba con el detalle del menú con su nombre, donde tenían designado sentarse.
