Generalizado reconocimiento a su legado y su capacidad política

La muerte de Víctor Fayad generalizó un respetuoso luto que desbordó a Mendoza Capital, se instaló en toda la provincia y cruzó el Desaguadero para generar impactos nacionales tanto en el comité de la UCR (a cargo del mendocino Ernesto Sanz) como en la propia Casa Rosada.

Desde allí, la presidenta Cristina Fernández -de un vínculo personal con el jefe comunal desaparecido- hizo referencia a su muerte ‘que conmueve tanto como la vida'.

Hoy el jefe de gabinete, Jorge Capitanich, la representará en el velatorio de Fayad, antes del entierro en el Parque de Descanso de Guaymallén.

El próximo lunes la especulación comenzará a girar en torno al futuro político de la Ciudad de Mendoza, a la proyección o desaparición del 'vitismo' dentro de la UCR; a los cálculos de crecimiento que harán demócratas, izquierda y peronistas a costa de un radicalismo capitalino sin su máxima figura y de lo que deberán hacer en la UCR para 'sostener al bastión' nunca perdido desde la vuelta a la democracia.

Todos estos cálculos y especulaciones se detuvieron ayer y permanecerán contenidos y sin desatarse al menos hasta que pase el fin de semana.

“Dejó vacío un sillón que le va a pesar a quien se siente en él”, pronosticó Sanz. Definió a Fayad como “un tipo intenso que se convirtió en el verdadero transformador de la Ciudad de Mendoza desde La Peatonal a La Favorita. Un peleador tozudo que se peleó con radicales, peronistas, empresarios y periodistas por igual”.

"Descansa en paz Viti Fayad, amigo y gran dirigente como pocos de la política. Un extraordinario ser humano. Abrazo fraterno a la familia”, tuiteó un conmocionado gobernador Francisco Pérez, quien se apersonó hasta el Hospital Italiano.

“Se ha ido un contrincante fuerte y uno de los hombres más respetados de la política”, destacó el vicegobernador Carlos Ciurca, quien subrayó que Fayad “quedará en la memoria de la política mendocina”.

El gobierno de Francisco Pérez decretó tres días de duelo en toda la provincia. Mientras, el macrismo suspendió la visita de la senadora nacional Gabriela Michetti a Mendoza, prevista para hoy.

En el radicalismo proliferaron los comunicados, mails, declaraciones y tuits lamentando la pérdida. “Fue una gran intendente, un gran gestor, una persona de muchas condiciones para la gestión pública y que llevó adelante una  gestión emblemática”, ponderó uno de sus máximos rivales internos, el intendente de Godoy Cruz, Alfredo Cornejo.

Mientras, el diputado nacional Julio Cobos (el blanco principal de las críticas internas de Fayad, quien lo llegó a llamar ‘el Grassi de la política’) quedó inicialmente enredado entre los primeros mensajes que hablaban de la muerte de Fayad, antes del desenlace.

Pero en el velatorio, declaró que fue a despedir “a un hacedor de la política a quien conozco de la escuela secundaria” y que “las peleó todas hasta último momento por su vida”.

Agregó que “a pesar de las diferencias que alguna vez tuvimos, los últimos momentos nos encontraron unidos trabajando de manera conjunta en las elecciones a pesar de su estado de salud. Lo vamos a seguir recordando como un ejemplo”, concluyó.

Con la firma del senador Gerardo del Río, el bloque radical habló del 'gran dirigente' que se fue y que dejó en Capital 'una huella que no se va a borrar nunca'.

Tres integrantes de ese mismo bloque: Jorge Palero, Raúl Ferrer y Norma Corsino, quisieron tener sus propias condolencias y le dedicaron un 'gracias Fayad por enseñarnos el valor de la política como herramienta de cambio'.

Mientras, manteniendo su situación de retiro político, el ex gobernador Roberto Iglesias (socio de la última aventura política de Fayad cuando en 2013 ambos se presentaron por afuera de la UCR y perdieron frente a Cobos) priorizó el silencio y sólo ofreció breves declaraciones de circunstancia, durante el velatorio.