Un yerno de la condenada jefa de un clan narco que operaba en Godoy Cruz, Sandra Jaquelina Vargas, fue condenado este miércoles tras un juicio abreviado en el que admitió haber asesinado a un adolescente de 18 años de edad en 2020 y haber intentado quitarle la vida a otras dos personas. Recibió una pena de 15 años y declaración de reincidencia.
Fuentes judiciales confiaron a Los Andes que Patricio Emiliano Garrido Montenegro (28) fue condenado pasado el mediodía por homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego y por la participación de un menor en calidad de coautor y por homicidio simple agravado por uso de arma de fuego en grado de tentativa en dos hechos en concurso real.
La audiencia de juicio abreviado final fue presidida por el juez Ariel Spektor, quien luego de que admitiera los hechos, condenó a Garrido a la pena de 15 años y dictó la declaración de reincidencia. Por ello, deberá cumplir la pena completa y no podrá acceder a beneficios procesales.
Garrido, miembro del clan Vargas por estar de novio con la hija mayor de “La Jaqui”, era temido en el piedemonte de Godoy Cruz, su zona de acción. Pero fue detenido en abril de 2021 luego de una serie de allanamientos realizados en el barrio Campo Papa y Los Toneles. Testimonios lo señalaban como el autor de los disparos que terminaron con la vida de Lucas Ariel Torres la madrugada del 17 de diciembre de 2020 en el Campo Papa.
Además fue condenado por el intento de homicidio de un hombre de apellido Valdivia y su hijo en Godoy Cruz en noviembre de 2018. El primero recibió cinco balazos, que terminaron con su vida más de un año después en el hospital Central. Su hijo fue atacado por el violento Garrido dos años después, en noviembre de 2021.
Garrido siempre fue relacionado al comercio de estupefacientes en el Oeste de Godoy Cruz, donde precisamente ejercían el control “La Jaqui” y sus “angelitos”.