Aunque su vida esté llena de exitosos títulos de películas hollywoodenses, Liam Neeson fue atravesado por un momento que cambió su vida por completo. Tuvo una historia de amor increíble con una actriz, pero todo terminó de la peor manera.
En paralelo a su carrera como actor, Neeson supo compartir muchos años de su vida con una mujer que rápidamente se convirtió en el gran amor de su vida. Se trata de Natasha Richarson, actriz que llegó al estrellato con su papel como Elizabeth James en la famosa película titulada “Juego de gemelas”.
En esa cinta, Richarson encarnó el personaje de la madre de las gemelas, quien se separó de su esposo y dividió a sus hijas para que ambos pudiesen disfrutar de alguna de ellas. Con el correr de los años, la película protagonizada por Lindsay Lohan se volvió un clásico y con ello la imagen de la pareja de Neeson.
La trágica historia de Liam Neeson y Natasha Richarson
Después de un poco más de un año de haberse conocido, la actriz contrajo matrimonio con Liam Neeson en 1994, y juntos tuvieron dos hijos, Michael y Daniel. A pesar de ambos ser muy famosos en la escena, pudieron mantener sus vínculos y familia fuera de las cámaras durante un tiempo.
En medio de tanto trabajo, el matrimonio tuvo la oportunidad de pasar unos días en Canadá para que el actor también grabara escenas de una película. Fue ahí donde ambos disfrutaron de hermosos días en solitario ya que sus hijos se quedaron en Nueva York, pero no sabían como todo terminaría.
Durante su estancia en Quebec, la actriz optó por visitar el centro de esquí Mont Tremblant con el objetivo de aprender un nuevo deporte. Mientras recibía una clase privada con un instructor que le explicaba las técnicas, sufrió una caída en la nieve y se golpeó la cabeza.
En ese instante, nada cambió pero todo empeoró con el tiempo. Una hora después del accidente, Richardson comenzó a sentir dolor de cabeza y luego se descompensó. Su situación llegó a tal nivel que tuvo que ser ingresada en coma, donde algunas horas después le indicaron a Neeson que su esposa tenía muerte cerebral.