Covid-19: ¿De qué se trata la “curva muda” que pone en jaque la estrategia oficial?

La circulación comunitaria de Sars-Cov-2 tiene en jaque a buena parte del país. De hecho del total de casos registrados hasta el momento, de acuerdo al último informe nacional, un 47,7% se relacionan con este concepto, cuando hace dos semanas estaba en 41,8%.

El problema es que mientras más aumenta esa cifra resulta cada vez más complicado hacerle frente al virus con estrategias de bloqueo y detección focalizada que son las más utilizadas en todo el territorio. En paralelo ha ido bajando la cantidad de infectados considerados importados (1,2%) así como por contacto estrecho que hoy están en un 34,2%.

Así, tal como se destaca en diario Clarín, cuanto menos abunda ese último tipo de contagio -que se produce por la pertenencia de cada nuevo infectado al entorno del primer eslabón de la cadena-, más débiles se vuelven los operativos de rastreo en los barrios y más circula el virus. De hecho desde allí introdujeron el concepto de “curva muda” que es la que se alimenta por la transmisión comunitaria que se considera que ayer hubo un récord de 3.604 casos positivos en el país, con epicentro en el AMBA.

Pero no son todas malas noticias, ya que en paralelo en el país aumentó considerablemente la cantidad de pacientes recuperados en comparación a las últimas dos semanas. Tal como explica el matutino esto tiene dos causa principales. La primera es que los casos de altas de las provincias demoran en llegar en comparación con la notificación de los positivos, mientras que la segunda tienen que ver con un cambio de criterio para considerar al paciente “curado”.

Previamente era necesario hacerle un PCR que descartara la presencia del virus, pero desde hace un tiempo se tomó una recomendación general de la Organización Mundial de la Salud (OMS). La misma considera que en pacientes leves o moderado no hace falta realizar este testeo, sino que se manda a la persona a su casa con la obligatoriedad de continuar con el aislamiento hasta diez días después de la aparición de los síntomas. Y hasta al menos 72 horas después de desaparecidos los síntomas respiratorios.