La tormenta de Santa Rosa traerá solo lloviznas y descenso de temperatura

El conocido fenómeno meteorológico que se da cerca del día 30 de cada agosto no llegará con una gran tormenta pero hará que el fin de semana tenga días grises y bastante frescos.

Santa Rosa trae lloviznas leves y un fuerte descenso de la temperatura. / Gustavo Roge
Santa Rosa trae lloviznas leves y un fuerte descenso de la temperatura. / Gustavo Roge

La tradicional tormenta de Santa Rosa, que ocurre en los días previos o sucesivos al 30 de agosto -fecha en que se celebra el primer milagro de la santa- suele no ser tan terrible por estas tierras. Sin embargo, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) adelantó que se producirán precipitaciones en forma de lloviznas y algunas nevadas leves durante todo el fin de semana. Esto podría extenderse hasta el lunes y martes, provocando un final e inicio de semana bastante gris.

La entrada del frente se produjo entre anoche y la madrugada de hoy, provocando una importante circulación de viento en altura, lo que los meteorólogos llaman vaguada. “Eso hace que haya alerta meteorológica de vientos intensos por encima de los 4.000 metros y el efecto zonda del viernes, que se pudo haber provocado en algunos sectores en Valle de Uco”, explica Fernando Jara, meteorólogo del SMN.

Estas condiciones, generan inestabilidad en alta montaña “con probabilidad de precipitaciones níveas”, aclara.

Hoy podría darse una rotación del viento Sur, con una intensidad de entre 10 y 20 kilómetros por hora, “lo que provoca un aumento de nubosidad en Mendoza y descenso en la temperatura máxima, que podría llegar a los 15°C, mientras que la mínima rondará los 4°C”, especifica Jara.

Por otra parte, el domingo se espera un cielo parcialmente nublado, con poco cambio en la temperatura, e inestable en cordillera con mínima de 3°C y una máxima de 15°C.

“El lunes tendríamos circulación de aire en zonas Sur y Sureste, aire húmedo en capas bajas y la circulación de núcleo frío en altura, que provocaría en horas de la tarde-noche del 31 precipitaciones y lloviznas en algunos sectores de precordillera. En tanto, en el Sur mendocino y Valle de Uco puede caer aguanieve”, anticipa el meteorólogo.

Así, agosto se despide con inestabilidad y setiembre nos recibe con días grises, lloviznas y descenso de la temperatura, porque el lunes tendremos una máxima de 12, en tanto el martes se espera una máxima de 10 grados.

Por qué “Santa Rosa”

La historia del nombre de esta tormenta tiene su origen en una leyenda que atribuyó poderes místicos a una monja llamada Isabel Flores de Oliva, quien encomendó a Dios una fuerte tormenta para impedir que piratas holandeses atacaran la ciudad peruana de Santa Rosa de Lima. Al parecer el hecho ocurrió en 1615 y desde ese momento, de boca en boca la leyenda se hizo parte del continente americano.

El poder de Santa Rosa, como comenzaron a llamarla, comenzó a escucharse cada vez más, y algunos países de la región (como Argentina), y sobre todo algunas provincias donde el Virreinato del Alto Perú era fuerte, comenzaron a implorar a esta santa cada vez que era necesaria una tormenta.

La provincia de La Pampa adoptó el nombre de la que luego fuera patrona, para garantizar a sus habitantes la humedad necesaria para desarrollarse y progresar: así nació Santa Rosa, la capital de la provincia pampeana.

Se viene una primavera más cálida y más seca de lo normal

El Departamento de Climatología del Servicio Meteorológico Nacional dio a conocer ayer, a través de su cuenta oficial de Twitter, la tendencia prevista para los próximos tres meses, cuando comienza la temporada estival.

Según esta estimación, las precipitaciones en la zona de Cuyo estarán por debajo de lo normal en un 45%, mientras que las temperaturas podrían ascender hasta un 40% por encima de lo normal.

El meteorólogo mendocino Fernando Jara, explicó que en nuestra provincia la acumulación de precipitaciones normales está en el orden de los 220 milímetros registrados cada año.

“Si tenemos una precipitación acumulada de 67% en la provincia Mendoza, y lo normal son los mencionados 220 milímetros anuales, esto significa entonces que estamos en déficit”.

En este sentido aclaró “nos quedan todavía cuatro meses para que precipite lo que falta. Pero estas proyecciones nos están avisando que va a ser menos, por lo tanto hay que tener mucha precaución por la crisis hídrica como también por los focos de incendios”, concluye.

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