Jardín: un repaso por todos los poderes curativos del aloe vera

El cultivo de esta antigua planta es un camino de ida al bienestar: sus hojas poseen propiedades curativas y sus inflorescencias son la delicia de las aves cantoras. En esta nota, de yapa, un video magistral de Grimoldi con valiosos tips de estación.

En el fondo del tubo floral, las atractivas inflorescencias de Aloe contienen un exquisito néctar que es un manjar para gran cantidad de aves.
En el fondo del tubo floral, las atractivas inflorescencias de Aloe contienen un exquisito néctar que es un manjar para gran cantidad de aves.

Deben existir pocas flores que me gusten tanto como las de los Aloes en invierno. Y no solo por su colorido (rojo intenso, anaranjado, amarillo según la variedad), sino por su llamativo aspecto en esta época del año.

Además, en el fondo del tubo floral, estas inflorescencias contienen un exquisito néctar con el que recompensan a sus polinizadores por producir la fecundación que permitirá su descendencia...

Como contrapartida, nuestro jardín recibirá la visita de gran cantidad de aves que nos acompañarán con sus bellos trinos y revoloteos.

Ya en tiempos de Carlo Magno, los guerreros llevaban plantas de Aloe en sus alforzas para curar con ellas sus heridas tras la batalla.

Ojalá que podamos derribar aquel mito que estigmatiza al Aloe como una “planta vieja” e inundemos nuestras casas con su bonita presencia.

Sus maravillosas hojas cuentan con múltiples propiedades curativas que podemos aprovechar en el hogar. Ya desde la época de Alejandro Magno, los guerreros llevaban Aloes en sus alforzas para curar con ellas heridas luego de la batalla.

Plantar Aloes solo nos traerá cosas buenas: flores bellas, hojas curativas y el trino de los pájaros en estos tiempos difíciles en que necesitamos cicatrizar nuestras heridas.

Cuidados del Jardín #13 2021

Consultas generales de ustedes

Posted by Guillermo Grimoldi on Thursday, July 8, 2021

+ TIPS POR REGIONES

  • Norte + Pimientos y tomates: Si tenés un lugar a resguardo del frío y con buena luz, ya podés sembrar pimientos y tomates, utilizando como maceta los tubitos que quedan del papel higiénico. En últimos días de agosto, ya sin riesgo de heladas, podrás pasarlos a tierra.
  • Centro +Bulbillos de Crocosmia: Dividí los bulbillos de Crocosmia que ya tengan más de dos años y aún estén sin brotar; esto hará que al final de la primavera se produzcan flores más grandes y bellas. Dentro de dos años, también en invierno, volvé a dividirlos.
  • Patagonia + Estanque congelado: Si tenés estanque o jardín acuático, verás que al congelarse aumentará su volumen y romperá las paredes del recipiente. Para evitarlo, colocá pelotas o botellas plásticas con la mitad del contenido de agua: al flotar, generarán huecos en el hielo que absorberán el cambio de volumen.
Si tenés un lugar a resguardo del frío y con buena luz, ya podés sembrar pimientos y tomates, utilizando tuppers viejos o los tubitos que quedan del papel higiénico.
Si tenés un lugar a resguardo del frío y con buena luz, ya podés sembrar pimientos y tomates, utilizando tuppers viejos o los tubitos que quedan del papel higiénico.

CARTAS DE LECTORES

Teresita, de San Juan, tiene una huerta orgánica con acelga, espinaca, perejil, romero, etcétera, y últimamente está encontrando comidas las hojas de acelga y espinaca. Ha revisado cada hoja y solo encuentra agujeros y bordes comidos con marcas de baba en su recorrido. Esto ocurre durante la noche, ya que en el día no ve ningún depredador. También revisó con linterna y no halló ninguna plaga.

Teresita, por lo que puedo ver en la fotografía y por el rastro de baba, se trata de babosas o caracoles que trabajan de madrugada. Te sugiero enterrar en el suelo latitas de picadillo o sardinas con cerveza en su interior: el olor a lúpulo los atraerá y morirán embriagados por el alcohol. Te irás encontrando los bichos muertos todas las mañanas hasta que los elimines por completo.

Si tenemos babosas o caracoles acechando la huerta, podemos enterrar en el suelo latitas de picadillo con cerveza en su interior: el olor a lúpulo los atraerá y morirán embriagados por el alcohol.
Si tenemos babosas o caracoles acechando la huerta, podemos enterrar en el suelo latitas de picadillo con cerveza en su interior: el olor a lúpulo los atraerá y morirán embriagados por el alcohol.

Marta Rodríguez Serra consulta y envía imágenes de un árbol que está en su casa y produce unas hermosas y extrañas flores, pero desconoce su nombre y si requiere cuidados especiales.

Marta, la fotografía corresponde a uno de los arbustos o arbolillos más bellos de nuestra flora nativa, cuyo hábitat se expande desde las provincias del Norte hasta el centro-norte de Río Negro. Su nombre popular es “lagaña de perro” y su denominación científica, Caesalpinia gilliesii; pertenece a la inmensa familia de las Fabaceae. Es muy apreciado en el mundo entero debido a sus hermosas flores, que tienen pétalos amarillos y llamativos estambres largos de color rojo. Es una planta resistente al frío y a los suelos pobres.

El beneficio que brindan las abejas al ambiente es fantástico, ya que son grandes polinizadoras y además, muy solidarias, pues recogen también polen para su colonia.
El beneficio que brindan las abejas al ambiente es fantástico, ya que son grandes polinizadoras y además, muy solidarias, pues recogen también polen para su colonia.

Daniel Aparicio, de Córdoba Capital, envía fotos de las hojas de un rosal comidas prolijamente de un día para el otro. Dice que no encontró ningún bichito, aunque buscó con esmero durante horas, y consulta qué puede hacer.

Daniel, ya no podés hacer nada, pues la que generó este daño es una abeja denominada popularmente como “Abeja cortadora” (Megachile rotundata), que precisamente corta prolijito el borde de las hojas del rosal para hacer un cartucho en el que pondrá sus huevos. ¡Pero no te preocupes! La buena noticia es que el daño ocurre solo un día al año y es nomás estético. Y te digo más: el beneficio que brinda esta abeja al ambiente es fantástico, ya que es una gran polinizadora. En poco tiempo, tu rosal lucirá espléndido.

Miriam Pistrilli Podestá quiere saber cómo se llama la planta de la fotografía que nos envía.

Miriam, la planta en cuestión se denomina científicamente Neomarica candida y es conocida popularmente como “lirio misionero”, “orquídea misionera” o “flor de un día”, justamente por el hecho de que sus flores duran apenas un día. Es una planta bella y muy rústica, que con medio día de sol producirá su mejor floración. Te aclaro que, a pesar de su nombre popular, esta planta no pertenece a la familia de las orquídeas.

* Especialista en Jardinería orgánica de Rumbos. Contenido exclusivo de Rumbos.

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