La mayoría de los comentarios fueron bromas y comparaciones. Sin embargo, también hubo muchos mensajes de odio contra el presidente.
Un seguidor del presidente Alberto Fernández decidió hacerse un osado tatuaje con el rostro del primer mandatario. Sin embargo, a saber si por un descuido del tatuador o su nula habilidad en el dibujo, el retrato resultó ser un fiasco.
Debido a la jocosa situación que representaba el tatuaje, un usuario de Twitter decidió subir una foto del desafortunado retrato, desatando una sarta de memes y comentarios de los ingeniosos y puntillosos internautas de la red social.
Algunos comentarios reflejan un odio recalcitrante por el trasfondo político que representa el dibujo, otros simplemente se limitaron a burlarse con memes o mensajes sarcásticos hacia la figura del primer mandatario.
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