Alegatos por el crimen de la empresaria Carleti: entre homicidio planeado y asesinato en ocasión de robo

En la jornada inicial de la etapa final, la fiscalía pide culpabilidad para Hisa y los Guerrero por femicidio, pero un querellante dice que la mataron para robarle.

El fiscal Quiroga (centro) durante su alegato.
El fiscal Quiroga (centro) durante su alegato.

Esta mañana comenzó la etapa final del juicio por la muerte de la empresaria de Tunuyán Norma Carleti y la fiscalía solicitó el veredicto de culpabilidad para Leonardo Hisa, Juan Carlos, kevin y Alexis Guerrero.

La misma posición tomó uno de los abogados de la familia Carleti; en cambio el abogado de Leonardo Hisa sostiene que se trató de un robo que terminó con la muerte de la empresaria.

Esta tarde se escucharán los alegatos de los defensores de Hisa y los Guerrero. El tribunal popular escuchará la versión de los defensores de los acusados.

El jefe de los fiscales de Homicidios Fernando Guzzo explicó que había una codicia por parte de Hisa ante la separación y “esa codicia lo lleva a actuar” para tener poder y por su ambición.

“Se está hablando de sociedades, sucesiones, divorcios como si esto tuviera algo que ver con el homicidio, como si esto tuviera algo que ver con que el señor Hisa mandó a matar a Norma a través de su empleado de confianza (Juan Carlos Guerrero) y él a través de sus dos hijos, a asesinar a su mujer”, dijo Guzzo y se inclinó por un veredicto de culpabilidad por la figura de homicidio agravado por el vínculo (femicidio) por precio o promesa remuneratoria.

El abogado Víctor Ábalos, representando a los hijos de Carleti dijo que el jurado debe inclinarse por un veredicto de culpabilidad “porque estamos ante un caso de homicidio agravado por el vínculo” ordenado por Hisa y ejecutado por la familia Guerrero.

El abogado Eduardo de Oro, representante del hijo de la pareja, Lucio Hisa, dijo que se trata de un caso de inseguridad “de un hecho de robo que tuvo como víctima a Norma Carleti. “Es una homicidio que sucedió en el transcurso de un robo”, dijo el querellante.

El crimen

Según la última acusación firmada por el fiscal Jorge Quiroga, de la fiscalía del Valle de Uco, el brutal crimen tuvo como móvil, como ya se dijo, “los graves conflictos personales y comerciales que existían durante los últimos años del matrimonio”.

Y si bien el crimen de Norma Carleti se produjo a las 23.46 del 4 de marzo de 2018, Leonardo Hisa habría comenzado a planear el asesinato de su ex el 23 de febrero, día en que Carleti le comunicó que “el tiempo de llegar a un arreglo sobre la división de bienes había finalizado”. “Mañana en la mañana yo me voy a Mendoza, firmo los papeles y de ahí me voy al aeropuerto… Así que mañana firmo todo”, le habría dicho la empresaria a su ex pareja.

Siempre según la hipótesis de la fiscalía, tras ese mensaje Hisa le pidió a Juan Carlos Guerrero que le consiguiera a alguien para matar a la empresaria a cambio de una suma de dinero.

Guerrero, entonces, le habría pedido a su hijo Kevin que buscara a una persona para terminar con la vida de Carleti cuando la mujer regresara de Buenos Aires. Además, Guerrero compró un Fiat 600 para utilizar en el crimen.

De acuerdo a la acusación fiscal, el 2 de marzo Carleti llamó a Hisa para decirle que firmaría “todos los documentos para que sus abogados inicien el día lunes siguiente las acciones legales”.

El 4 de marzo, a las 21, Guerrero llamó a Hisa, quien le dijo que debía “acelerar la muerte de su esposa, ya que si Norma Carleti firmaba el lunes 5 de marzo las acciones legales del divorcio, los bienes deberían distribuirse en la liquidación de la sociedad conyugal e Hisa perdería una serie de propiedades que pretendía mantener en su poder”.

Fue entonces que Guerrero, como no consiguió a un asesino, decidió planificar la muerte de Carleti: el 4 de marzo a las 23.45, Kevin Guerrero, estando con prisión domiciliaria, junto a su hermano Alexis y otra persona no identificada se subieron al Fiat 600 que había adquirido su padre.

Los tres llegaron hasta el cruce de las calles Almirante Brown y Dalmau, estacionaron y fueron caminando hasta la casa de Carleti, ubicada en calle República de Siria 348, de Tunuyán.

Luego treparon la medianera, rompieron la puerta de la cocina, entraron y encontraron a Norma, “propinándole uno de ellos una patada en el rostro, como así también le asestaron 55 puñaladas con dos cuchillos de cocina con cabo de madera, provocándole la muerte y, finalmente, los causantes se retiraron del lugar en el automóvil antes mencionado, sin llevarse consigo elemento de valor alguno”, se lee en el expediente.

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA