El nuevo gobierno de Israel

El objetivo principal del nuevo gobierno que se ha formado en Israel es sacar del poder a Netanyahu. Éste ya lleva 12 años ininterrumpidos y se acabaron los intentos para que se vaya en forma voluntaria. De tal manera es que se ha formado una alianza totalmente heterogénea.

Israel tiene como forma de gobierno, una democracia parlamentaria. El Parlamento necesita 61 votos de un total de 120 diputados para nombrar a su primer ministro y formar gobierno. El primer ministro dura 4 años en su ejercicio, Bennet y Lapid rotarán este cargo durante dos años.

La coalición anti–N de este nuevo gobierno está formada por los jefes de 8 partidos: 2 de centro, 3 de derecha, 2 de izquierda y uno árabe.

1- Yair Lapid: se hizo famoso por ser un periodista televisivo, fundador del partido político Yesh Atid (“Hay futuro”). La gran importancia de este político es que es laico. En un país como Israel, donde la religión judía tiene una fuerte presión en la sociedad con sus sábados donde se paraliza al país, aparte de otras exigencias. Ser laico en Israel es sumamente importante para lograr los cambios que lleven a la Paz.

2-Naftalí Bennet: socio de Lapid y ya elegido primer ministro de Israel. Salió en el quinto lugar en las elecciones generales con un 6% de escaños obtenidos con su partido Nueva Derecha (Yamina), nacionalista religioso ultraderechista y antiguo aliado de Netanyahu. Es decir nada. Fue ministro en varias oportunidades de los gobiernos de Netanyahu, de tendencia neoliberal. Está a favor de la anexión y de los asentamientos judíos en Cisjordania y muestra su racismo al despreciar al árabe en expresiones públicas. En público se muestra usando la quipá, demostrando su carácter religioso y no laico.

3- Avigdor Lieberman: (Yisrael Beiteinu) Israel Nuestro Hogar, nacionalista secular de derecha, su electorado está compuesto en su mayoría por inmigrantes rusos.

4- Gideon Sa’ar: Nueva Esperanza. Saar, es hijo de un argentino, se fue del Likud y formó su propio partido, de tendencia derechista.

5- Benny Gantz: Azul y Blanco (Kajol Lavan), centro derechista que salió segundo en la anterior elección y que firmó un acuerdo con Netanyahu para rotar como primeros ministros. Netanyahu no cumplió con el pacto y Gantz tendría que haber asumido en noviembre como primer ministro, cosa que no va a suceder. Actual Ministro de Defensa.

6- Partido Laborista: liderado por Merav Michaeli, otra joven activista, periodista de radio, representa a este partido de centro izquierda.

7-Meretz: liderado por Nitzan Horowitz, periodista televisivo a cargo de este partido izquierdista.

8- Mansur Abbas: líder del partido islámico árabe moderado Raam. Desea pactar con el gobierno de Israel para asegurar los fondos y las reformas necesarias para el beneficio de la sociedad árabe israelí. Participó en las elecciones de 2015 donde Los partidos árabes se convirtieron en la tercera fuerza política de Israel. Se opuso a los tratados de paz de Abraham y no pertenece ni a Hamas ni a Al Fatah. Aclaremos; son árabes israelíes. Es decir son ciudadanos israelíes y tienen, sobre el papel, los mismos derechos y obligaciones, aunque en la práctica sufren una importante discriminación.

Conclusiones o curiosidades

1. Se produce un cambio generacional al aparecer nuevas y jóvenes figuras políticas. Tres líderes han salido de los medios masivos de comunicación, la mayoría de la televisión. Se confirma con esto, la influencia de la televisión como formadora de opinión y por lo tanto un arma poderosa y deseada por el poder político para dominar las masas.

2. También se nota, un tibio avance de laicos y del feminismo con mujeres jóvenes laicas en la conducción política (Ayelet y Merav), aunque Israel fue pionera en la participación política femenina con Golda Meier.

3. Aparentemente esta alianza se romperá y cada uno siga por su camino. Bennet asumirá el poder provocando la caída de Netanyahu. Y, también pareciera, poco probable que el gobierno termine el mandato pactado en 4 años.

4. La postura sobre el problema palestino vuelve a ponerse en la mesa de negociaciones. Existen posturas muy duras como la de Bennet que se opone a la solución de dos Estados para dos pueblos y apoya la anexión de los territorios ocupados por la guerra. Sin embargo una cosa es hacer una declaración pública o periodística, y otra es, cuando se es primer ministro. Recordemos que fue la derecha israelí, en contra de sus postulados, la que tuvo que ceder territorios a cambio de paz (Beguín y Sharón). Se abre, así, una nueva etapa donde se verán las nuevas propuestas de paz que seguramente rechacen el plan del siglo de Trump. Esta tarea significará un gran desafío para las nuevas generaciones políticas que están surgiendo tanto del lado palestino como de Israel.

5. La ultraderecha religiosa es tan extrema que la ultraderecha laica pasa a ser de derecha moderada.

6. Lo curioso de este acontecimiento es que los principales candidatos políticos han sido, en distintos tiempos, aliados de Netanyahu en sus diversos gobiernos, y que, ahora, gracias al apoyo de los árabes israelíes este gobierno puede asumir.