Un artista italiano sorprende y vende una escultura invisible por 18.300 dólares

Se trata de Salvatore Garau, que vendió una pieza de “vacío” y le exige a su comprador acomodar un espacio amplio y especial para su exhibición.

Salvatore Garau, vendió una pieza de “vacío” y le exige a su comprador acomodar un espacio amplio para su exhibición.
Salvatore Garau, vendió una pieza de “vacío” y le exige a su comprador acomodar un espacio amplio para su exhibición.

El artista italiano Salvatore Garau logró vender su obra de “vacío”, a un precio superior a los 18.000 dólares (15 mil euros). Según destacó InfoBae, El autor la define como “La escultura inmaterial”, la obra se llama “Yo Soy” (‘Io sono’, en italiano) y la casa de subastas Art-Rite fue la encargada de realizar la venta.

La obra del exponente Italiano Garau, es enteramente invisible, indicador de que no se puede reproducir en la web. Esta pieza viene con recomendaciones para su comprador, este tiene que garantizar que la estatua invisible tenga suficiente espacio, por lo que debe colocarse en una casa particular, en una habitación especial libre de cualquier obstáculo y con dimensiones de unos 150 x 150 metros. No es necesario tener sistemas de iluminación o de control del clima, porque no se puede ver nada.

Hace unos meses, Garau expuso su primera obra invisible llamada “Buda en Contemplación”, esta fue expuesta en Plaza de la Scala de Milán. Sin perder su curioso toque de surrealismo, su nueva obra terminó siendo la protagonista en la subasta de Ar-Rite. Al no ser una obra física, en el catálogo de la subasta, donde normalmente se reproducen imágenes de las piezas a subastar, aparecía solo un espacio en blanco.

Lo único tangible y visible de la escultura abstracta es el certificado de garantía que se llevó el comprador que es el que da fe del archivo de la obra.

“El buen resultado de la subasta atestigua un hecho irrefutable. El vacío no es más que un espacio lleno de energías, e incluso si lo vaciamos y no queda nada, según el principio de incertidumbre de Heisenberg, la nada tiene un peso”, dijo el artista.

Los críticos asumen que el artista se burló de todos, y que una escultura como éstas puede ser llevar el arte moderno a un nivel de extrema exageración, Grau tiene un argumento que lo respalda: el vacío es todo menos nada.

“Por tanto, tiene energía que se condensa y se convierte en partículas, en fin, ¡en nosotros! Cuando decido exponer una escultura inmaterial en un espacio dado, ese espacio concentrará una cierta cantidad y densidad de pensamientos en un punto preciso, creando una escultura que tomará las más variadas formas solo desde mi título”, añadió el artista plástico italiano.

Obras famosas similares

Estas creaciones ‘al vacío’ dan lugar para recordar otras obras del mundo del arte que han tenido particular trascendencia en internet, uno es la famosa banana pegada con cinta a una pared, valuado en unos 12 mil dólares y curiosamente también es de un artista italiano llamado Maurizio Cattelan.

Desplegó una gran notoriedad esta obra cuando hace algunos años atrás el artista plástico David Datuna despegó la banana de la pered y comenzó a comer la banana en frente de los asistentes a la galería. Desató un fuerte debate en redes sobre lo que se considera y no “Arte”.

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