Lollapalooza 2019: a puro sol, se tomó una revancha inolvidable

Se estima que, entre el viernes y ayer, acudieron al Hipódromo de San Isidro (Buenos Aires) más de 300.000 personas. ¿El motivo? El monumental Lollapalooza 2019.

Es decir, unas cien mil personas por día, aunque en realidad fueron más (si se cuentan los sorteos, invitados, etcétera). Fue, sin dudas, el evento musical más convocante entre los jóvenes, que este año fueron realmente escuchados por quienes idearon la programación (pues muchas de las bandas son las favoritas del público "centennial").

Gran convocatoria para un festival que no es precisamente barato: alrededor de tres mil pesos costó la entrada para cada día, sin contar los "extras" de pasar todo el día en la maratón. Como punto a favor, este año la organización estuvo mejor. Por ejemplo: los escenarios no se pisaron en sonido (antes se cruzaba la música porque estaban cerca, aunque ahora los separaron más, aprovechando mejor el espacio). Hubo buena limpieza, aunque escasos puntos para hidratarse.

Es que esta vez, a diferencia del año pasado (cuando una tormenta fracasó el último de los días), hubo tres jornadas largas y calurosas.

Ayer domingo, la grilla finalizó con las presentaciones de la Mona Jiménez, Lali Espósito, Greta Van Fleet, Paulo Londra, Caetano Veloso, Lenny Kravitz y Kendrick Lamar, entre otros.

Ciertamente, algunas figuras llaman la atención: el caso de la Mona, por ejemplo, que se presentó durante la siesta de ayer con un claro objetivo de atraer la mayor cantidad de público posible (el año pasado hicieron lo mismo con Damas Gratis). Hubo cordobeses presentes, aunque para muchos “centennials” fue un show extraño y hasta exótico.

El viernes destacaron las presentaciones de Rosalía, Interpol, Post Malone, Twenty One Pilots, Years & Years y El DJ estadounidense Steve Aoki. Mientras que el sábado tuvo varios puntos altos, como la presentación de los mendocinos de Perras On The Beach, el controvertido debut de Candelaria Tinelli, Troye Sivan, Foals y hasta Fito Páez.

Sin embargo, toda la energía estuvo reservada para la banda liderada por Alex Turner: Arctic Monkeys, quien volvió tras cinco años al país, y toda la mística fue para ellos.