Crece el consumo de vinos y destilados sin alcohol

Creció la tendencia a consumir cervezas, destilados y vinos con baja graduación alcohólica.
Creció la tendencia a consumir cervezas, destilados y vinos con baja graduación alcohólica.

El mercado mundial de estas bebidas creció un 25% en el mundo. La situación local.

Estudios recientes muestran un cierto crecimiento de la tendencia hacia el consumo de bebidas no alcohólicas o de baja graduación. Alertadas por estos datos, las empresas comenzaron a buscar variantes de consumo, pero siempre con la referencia de las bebidas alcohólicas tradicionales.

Según datos del Registro Internacional de Vinos y Espirituosos (IWSR, por sus siglas en inglés), entre el 2015 y 2020 el mercado de bebidas no alcohólicas creció un 25% a nivel global. Y para 2025 se espera otro crecimiento del 15%.

Si bien sabemos que las bebidas alcohólicas siguen ocupando un lugar de privilegio en la industria, las mismas estadísticas sugieren que será del 1% el crecimiento en cinco años del consumo del vino, por ejemplo. A su vez, los usuarios continúan sin abandonar la experiencia de consumo social ni las bondades de las bebidas tradicionales.

Entonces, esto quiere decir que poco a poco crece la tendencia a consumir vinos, destilados y cervezas sin alcohol o con bajo contenido de alcohol.

En cinco años, el mercado de bebidas sin alcohol creció un 25%.
En cinco años, el mercado de bebidas sin alcohol creció un 25%.

Estos datos son globales. La realidad de cada región tiene sus ribetes. Sin embargo, a medida que la tendencia a consumir menos alcohol se acelere, cada vez más ofertas de estas bebidas va a tener el mercado.

Estas estadísticas pueden dar cuenta de dos tendencias. Por un lado, la que involucra a un crecimiento en la concientización sobre las consecuencias del alcohol en exceso en el organismo. La otra, se relaciona con la penalización del consumo al volante. El perfil de estos consumidores incluye un rango etario joven, de 25 a 35 años.

Atentos a esta tendencia, algunas marcas desde hace años comenzaron a probar con lanzamientos de bebidas sin alcohol para luego analizar el impacto. En Argentina hubo casos, por lo general, de difícil aceptación.

Los jóvenes tienden a preocuparse por el efecto del alcohol al volante y en el organismo.
Los jóvenes tienden a preocuparse por el efecto del alcohol al volante y en el organismo.

Las cervezas cuentan con más experiencia en el rubro. Los vinos tienen mucho por experimentar. Hoy la tendencia parece inclinarse hacia la producción de bebidas más ligeras y con menor graduación alcohólica. Sin embargo, no se descarta que proliferen experiencias de graduación 0,0% para atraer a nuevos clientes.

Desde algunos sectores de la industria en Mendoza han sido muy críticos con esta idea. Sin embargo el año pasado, el titular del Instituto Nacional Vitivinícola Martín Hinojosa dijo: “Nos preguntamos por qué no darnos la oportunidad de sumar otro tipo de público; tal vez los jóvenes son mucho más desestructurados a la hora de consumir y entiendo que es una posibilidad que nos permite vender más. Esos son los temas que tenemos que empezar a conversar en la vitivinicultura: cómo hacer para vender más y por qué no darnos la posibilidad de sumar este tipo de productos que permitirán otro público”.

Y vos… ¿los tomarías?.

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