Crece un 19% la faena porcina, con un sistema de costos más alto

En el reciente informe sobre los Resultados económicos en granjas de producción intensiva de cerdos, elaborado por Juan Manuel Garzón y Martina Abduca de la Fundación Mediterránea (Ireal), se analizaron tres escenarios al mes de febrero para la cría intensiva de ganado porcino en Argentina. Desde Mendoza, que representa aproximadamente el 1% del total de la producción nacional, sostienen que la suba de los costos, principalmente los vinculados a la alimentación, han comprometido los margenes de rentabilidad.

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Desde la secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, en el Boletín Porcino del primer mes de 2023 (último registro oficial), se señala que de enero a enero aumentó un 18,6% la faena porcina en el país pasando de las 534.899 cabezas de 2022 a las actuales 634.125. Se admite además que hubo una merma del 6% de la actividad al compararse el total faenado con el volumen carneado durante el último mes del año pasado, que fue de 674.578 cabezas.

Al referirse a la demanda en el mercado interno, el organismo nacional muestra un aumento en el consumo per cápita durante el último año. Pasando desde los 13,93 kilos (promedio) de carne de cerdo en enero de 2022 a los actuales 15,49 kilos. Alberto Larregola, de la finca Lele Aike en General Alvear, explicó que del total de la demanda consumo cerca de 11 kilos corresponden a la carne en fresco, mientras que los otros cuatro kilos restantescorresponden a chacinados y fiambres.

Estimaciones generales

En el informe que elaboró el Ireal se presentan estimaciones de resultados económicos (márgenes netos) a febrero de 2023, en un sistema de producción intensiva de capones de 500 madres, en establecimientos de referencia que operan con distintos grados de eficiencia, tanto en conversión alimenticia como en cantidad producida de kilos de carne por cerda madre al año.

Garzón y Abduca establecieron dos parámetros principales para poder profundizar en su análisis: el primero, relacionado a la localización de los establecimientos y, el segundo, a las diferencias de los costos generados a partir de distintas condiciones (precios) de acceso a materias primas críticas (cereales, harinas proteicas). En nuestra provincia, según lo que han señalado los productores, la trepada del dólar ha impactado de lleno en el precio del maíz, que es el alimento base para la cría de los animales, también por la variación del combustible que ha encarecido el flete.

Con respecto a la conversión alimenticia en carne, los autores plantean tres posibles situaciones que están relacionadas los valores promedio: partiendo desde los 2,5 hasta los 3,1 kilos de alimento por kilo de capón producido. Larregola, ex presidente de la Cámara de Comercio de General Alvear, agregó que “hay una referencia histórica para fijar el precio del kilo de carne de cerdo, que equivale a siete kilos de maíz. Si, el kilo de maíz está a $ 50 aproximadamente el kilo de carne cuesta $350″.

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Fotografía del primer bimestre

Las estimaciones del Ireal muestran un deterioro en los márgenes de rentabilidad de la actividad hacia fines del año pasado, que se continuóen el primero bimestre del año. En febrero del 2023, el establecimiento de menor eficiencia tuvo márgenes negativos (porque perdió $29 por kilo producido y vendido),mientras que un establecimiento de mayor eficiencia, en el otro extremo del sistema de producción, mantuvo su margen positivo (porque ganó aproximadamente $ 53 por kilo).

En tanto que una granja de eficiencia media, la situación más representativa para la mayoría de los establecimientos del país, con un tamaño de 500 madres y más, logró márgenes positivos de $ 20 por kilo.

De acuerdo a lo señalado por Garzón y Abduca “el excedente económico de los establecimientos se viene reduciendo, y esto sucede debido a que los costos están yendo más rápido que los ingresos. En los últimos cuatro meses (de noviembre a febrero), los ingresos de las granjas (venta de capones) han crecido a una tasa media del 3,4% mensual”, mientras que los costos lo han hecho al 7,7% mensual.

El gasto en alimentación, el rubro de mayor incidencia en el costo de las granjas, se ha incrementado a una tasa mensual del 8,3%. Advirtiendo que en el período 2019-2020 este gasto representaba entre el 60% y 63% del costo total, pero desde el 2021 por el encarecimiento de los commodities agrícolas la incidencia de este rubro representa el 69% de la actividad. Tal como explicaran los productores locales, el costo del transporte de los animales ha crecido un 30,5% en términos reales entre febrero de 2022 y del 2023, sin contar los gastos de energía de genética que crecen a un ritmo similar al de los ingresos.

Competencia en el mercado

Lucas Olaviaga, quien fuera responsable del sistema de producción de la Granja Pampa del Huarpe, en una entrevista concedida a Los Andes había explicado: “El precio de la carne vacuna favorece o no la producción porcina. El argentino consume carne bovina y eso hace que si el precio está bajo prescinda del consumo de otras canes o viceversa. porque cuando el precio de la res aumenta el consumidor se vuelca a opciones más accesibles”.

En el informe de la Fundación Mediterránea se observa que en los últimos cuatro años (2019-2022), el margen mensual de producción muestran una relativa estabilidad en el promedio anual de demanda, y una marcada estacionalidad de mayo a agosto. Un dato que es confirmado por los números de Producción (in res con hueso) que ha relevado la secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, que se muestra un incremento del 19,4% (pasando de 48.868 cabezas a 58.356), y una caída interanual de las importaciones en enero del 41,2% (cayendo de 4.327 a 2.544).

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Para los autores Garzón y Abduca, las granjas de baja eficiencia no han tenido prácticamente un excedente económico durante los últimos cuatro años. El alvearense Alberto Larregola puntualizó que es un pequeño productor y que la rentabilidad la logra al producir alimento para el ganado, “crío al campo, en el que planté alfalfa, porque para poder comprar maíz o grano en el norte de La Pampa, Córdoba o Santa Fe, es necesario tener dólares para poder comprar alimento”.

Para el informe de Ireal, las granjas de eficiencia media han logrado números positivos de entre $ 45 y $ 50 por kilo en el promedio (una suma que es entre el 15% y el 17% de los costos totales), y las de eficiencia alta un rango de ganancia de entre $ 75 y $ 85 por kilo (entre el 28% y 31% de los costos).