Murió el periodista Jesús Quintero, “El loco de la colina”

Tenía 82 años y se hizo famoso en Argentina en los ‘80 por entrevistar a personajes marginales. Tenía un estado delicado de salud hace varios meses.

Jesús Quintero, falleció en España a los 82 años. (DPA)
Jesús Quintero, falleció en España a los 82 años. (DPA)

A los 82 años falleció Jesús Quintero en Cádiz, el hombre que creó un estilo para entrevistar y se atrevió a llevar a los medios a personajes que no suelen ser protagonistas. Sus familiares informaron que el mítico comunicador tenía un delicado estado de salud, por lo que fue a descansar y no se despertó.

La familia del periodista confirmó que sufría una afección respiratoria y que ya había sido operado de una patología cardiaca, en el Hospital Juan Ramón Jiménez de Huelva, donde llegó a ser ingresado en la UCI.

El gran entrevistador, dejó en la Argentina una huella con su programa “El loco de la colina”, donde escuchaba y hacía escuchar los problemas de los desesperados, los solitarios, los necesitados de consejos y los sedientos de afecto. Con un hablar pausado, las palabras justas e intercalando un poco de filosofía, intentaba responder a vidas sin respuestas. En el programa, recorría España en una furgoneta llena de libros y sartenes, entrevistando a “los nadies”, gente sin fama pero con historia, personajes sin nombre pero con vida, esos que difícilmente podrían tener prensa, de no ser por Quinteros que los magnificaba.

“Cualquier persona tiene derecho a 15 minutos de reportaje”, pregonaba el español.

Contra todo pronóstico, la propuesta fue un éxito. La cadena comercial, Ser, lo reclutó en sus filas. Pocos sabían que detrás de sus palabras estaba Raúl del Pozo y luego Javier Salvago, que escribían lo que Quinteros decía. Pero el locutor era dueño de sus prolongados silencios donde dejaba al entrevistado ser escuchado.

“Cualquier persona tiene derecho a 15 minutos de reportaje” afirmaba Quintero. | jesusquintero.es
“Cualquier persona tiene derecho a 15 minutos de reportaje” afirmaba Quintero. | jesusquintero.es

Para él había dos clases de silencio. El de dos personas que no tienen nada que decirse y el silencio emocionado de un encuentro que, a la vez, puede ser sorpresa y acercamiento.

Quiero que el entrevistado me cuente sus cosas. No voy a acosarlo, ni chuparlo, ni vencerlo. Nunca uso la estocada. Si ha de morir se matará solo y con sus propias palabras. No me creo nada esa moda del reportaje agresivo” sostenía y agregaba “Si te pones contra el entrevistado, lo pierdes. Si llegas arrogante, también. Si llegas muy humilde, te derrota. Hay que decirle sin palabras ‘Tú eres quien eres… pero yo no soy un tonto”.

Considerado un maestro para una generación de periodistas que se formó escuchando a Quintero en la Radio Nacional de España, y que posteriormente llegó a suelo argentino retransmitido en los ochenta. Cuenta la leyenda que divagaba sobre una canción de los Beatles (The fool on the hill) cuando confesó sentirse como un loco en una colina. Esa fue la inspiración para el programa que terminó arrasando entre la audiencia nocturna argentina.

Desde hace unos días circulaba en redes un video viral con un viejo reclamo, Jesús despotricaba contra “la clase dominante actual”, y esa apología de la ignorancia: “Nunca como ahora la gente había presumido de no haber leído un puto libro en su jodida vida, de no importarle nada que pueda oler levemente a cultura, o que exija una inteligencia mínimamente superior a la del primate”.

“Los analfabetos de hoy son los peores porque en la mayoría de los casos han tenido acceso a la educación. Saben leer y escribir, pero no ejercen. Cada día son más y cada día el mercado los cuida más y piensa más en ellos”, se enojaba.

Sus visitas a la Argentina

En 1999 volvió a la Argentina por última vez, ese viaje estuvo atravesado por un hecho violento: usaba la sala de edición de una productora porteña cuando ingresaron dos delincuentes. El español terminó con el pómulo izquierdo golpeado por un revólver y los 3.800 dólares de sus bolsillos, robados.

“Quisiera que los encuentren, no para apresarlos: para preguntarles por qué, para entrevistarlos”, lanzaba entonces con ese espíritu curioso que lo llevó a hacer historia de uno y otro lado del océano.

Además de entrevistar a “los nadies”, decía querer hablarles especialmente a “sádicos, enfermos, ancianos, sonámbulos”. Por lo que en un momento decidió entregarse a charlas con asesinos como su diálogo con Ramón Lijo Ageitos, marinero vasco que mató a su ex amante y a un amigo, que entró en la historia periodística.

Jesús Quintero destacó en los años 80 en la Argentina
Jesús Quintero destacó en los años 80 en la Argentina

Además su entrevista con Carlos Eduardo Robledo Puch, uno de los criminales más temibles de la Argentina, en la cárcel de Sierra Chica, donde el Chacal le dijo emocionado: “¡Ah!, ¿usted es El loco de la colina?”.

Su primer visita fue en un contexto de hiperinflación alfonsinista en el 1989. “ATC me da un espacio para mis entrevistas, pero solo me paga la oficina que tengo en el hotel”, advertía sobre su mecanismo “independiente”. Para 1998 volvió al país con el ciclo El lobo estepario, por FM Millenium (106.3).

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA