Iniciativa sobre el descarte de alimentos

En tiempos de grandes carencias económicas en muchos hogares mendocinos, en los que a veces escasea la comida, cobra importancia un proyecto legislativo para evitar que se desperdicien alimentos, que algunos comercios y empresas tienen que descartar diariamente por no poder comercializarlos.

En Argentina se pierde o desperdicia el equivalente al 12,5% de todos los alimentos que se producen en el país en un año.
En Argentina se pierde o desperdicia el equivalente al 12,5% de todos los alimentos que se producen en el país en un año.

Según datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), en Argentina se pierde o desperdicia el equivalente al 12,5% de todos los alimentos que se producen en el país en un año. Se tiran 16 millones de toneladas de alimentos en ese período, lo que representa unos 362 kg per cápita.

En Mendoza esto también ocurre, pero no hay datos actualizados de cuánto queda sin utilización. En años anteriores, un estudio reveló que se desechaban 30 toneladas de alimentos por día, que significaban unas 43 mil raciones de comida, pero no podemos confirmar si eso ocurre hoy.

De todos modos, en Mendoza hay legislación provincial y ordenanzas municipales en varias comunas que apuntan a la reducción de pérdida de alimentos lo cual, en las actuales circunstancias de pobreza, es un despropósito total. El tema cobra mayor relevancia en la realidad actual de pandemia, ya que una forma de enfrentar la enfermedad con mayores posibilidades se encuentra en el acceso a una alimentación saludable.

Por eso importa hacer mención a un proyecto en curso en la Cámara de Diputados, iniciativa de la legisladora Tamara Salomón (UCR), con la colaboración de su par Cecilia Rodríguez, para que se cree, en el ámbito local, un régimen provincial de donación de alimentos.

Esta iniciativa se suma a ordenanzas de varios municipios, como los de Luján de Cuyo, Godoy Cruz y Rivadavia y pretende reducir la eliminación de alimentos que podrían llegar a asociaciones y consumidores.

Ocurre que, pese a la meritoria intervención de entidades de bien público, como la Fundación Banco de Alimentos y AlimenDar Mendoza, todavía se pierden muchos kilos de productos por día, que podrían ser redistribuidos por organizaciones civiles como las nombradas u otras de fuerte espíritu solidario.

Lo que se busca es crear dos registros en la materia: en una primera instancia, un listado de asociaciones que estén en condiciones de salubridad e infraestructura de recibir la comida y redistribuirla, con la precaución de que se trata de productos que deben ser consumidos en la misma jornada en que son recibidos.

Por otro lado, y desde la Dirección de Bromatología, se debería habilitar un registro más, llamando a la responsabilidad social para que las entidades en condiciones de hacer esta tarea, se inscriban voluntariamente y generen el vínculo entre las grandes cadenas de supermercados, empresas de banquetes y restaurantes, que son los negocios que diariamente se deshacen de alimentos que no han podido comercializar.

Hay que señalar que, a nivel federal, existe el Plan de Reducción de Pérdidas y Desperdicios de Alimentos, luego de la promulgación de la ley nacional 27.454. Esta norma creó el Registro de Instituciones de Bien Público Receptoras de Alimentos, en el Ámbito del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación. Además, una vez puesta en marcha la actividad, se generaría un sello verde para aquellos negocios de comidas que quieran sumarse a la campaña y queden convalidados por ese símbolo.

Otra de las soluciones asociadas a esta operatoria que se planea ejecutar, tiene que ver con los hogares, donde muchas veces, por imprevisión o falta de cuidado, se desperdician alimentos, que es lo que se busca combatir.

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA