Con Montané Argentina fue subcampeona

Beach waterpolo se estuvo practicando en distintos lugares del mundo en lagos o en mar, en los momentos de estación cálida. Esta modalidad está teniendo un crecimiento veloz alrededor del mundo y fue entonces que la Federación Internacional de Natación (FIN) decidió tomarla en cuenta entre sus disciplinas, por lo que su comisión confeccionó un reglamento y lo incluyó en el Mundial de Deportes Acuáticos desarrollado en Gwangju (Corea del Sur) a modo de exhibición. En este torneo, Argentina se coronó subcampeón mundial de beach waterpolo con la presencia del mendocino Juan Pablo Montané.

El waterpolo beach es una variante del waterpolo tradicional con diferencias en el reglamento y en las dimensiones de la cancha, además de convocar a menor cantidad de jugadores.

"Es un juego reducido que incluye cuatro jugadores en campo por equipo (3 jugadores y el arquero) y no como el waterpolo que tiene 7. La cancha es de 15x10 metros (en aguas de mar, lagos o pileta) y el arco más chico, con 10cm menos de altura y 50cm menos de largo. Y los cambios en sus reglas hacen que un partido sea más dinámico. Por ejemplo, que el saque tras un gol sea desde el arco y no desde mitad de la cancha", contó el mendocino que fue parte de esta primera cita ecuménica de la modalidad.

Montané contó que pronto se podrá ver en nuestro país, ya que según argumentó la Federación Argentina "vio esta modalidad como muy positiva para comenzar a implementarla".

"Fue una experiencia muy buena. Nunca habíamos jugado en este marco, era la primera vez y nunca lo practicamos. Como balance nos fue muy bien", confió el jugador que además será parte de los Juegos Panamericanos de Lima 2019 como uno de los dos jugadores suplentes de la Selección argentina de waterpolo.

"El objetivo de todo eso fue evaluar si la FIN lo crea como deporte nuevo, como el beach handball, el beach volley o el basquet 3x3. Es una alternativa para que sea un deporte vistoso y rápido. Una vez que se oficialice en el país van a regir los distintos campeonatos. Pero en mi caso, que soy profe y los otros entrenadores que fueron además de los dirigentes, interesó mucho la idea del waterpolo beach para implementarlo en distintos clubes. A nivel juego no requiere otro tipo de contenidos ni habilidades que no sean las mismas de waterpolo. Y el hecho de que se necesite menos cantidad de jugadores (con 7 ya se puede participar) es muy viable para su planificación e implementación. Esta modalidad fue evaluada por la dirigencia, tuvo su impacto positivo en la Federación Argentina y fue válido para comenzar a difundir este deporte", explicó el jugador de GEBA.

Con respecto a Lima, la competencia comienza el 4 de agosto, por lo que el mendocino arribará a Perú el 3 para sumarse a la delegación nacional. Él está en la lista como uno de los dos suplentes del equipo argentino.

En beach waterpolo Argentina cayó en la final del mundial exhibición por 22-7. Antes había vencido a China 25-23, empató contra Canadá por 14-14 y cayó con Francia en la fase de grupos.

El equipo argentino: Guido Martín Poggi, Nicolás Provenzano, Matías Hoorn, Octavio Salas, Augusto Antunes, Montané y Tomás Giri. Entrenador: Gabriel Martino.
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Reglamento

Algunas diferencias con el waterpolo: las dimensiones 15x10 en aguas de mar, lagos o pileta. Los arcos son más pequeños, los jugadores son 4 en cancha por equipo, el saque después de un gol es desde el arco y no desde mitad de la cancha y se juegan dos tiempos de 10 minutos con posesión de 20 segundos. Hay expulsiones, además no hay tiempo estipulado para permanecer afuera del agua, basta con el tiempo que el jugador tarda en ir a tocar una baliza esquinada y en volver al rectángulo de juego. Los cambios pueden hacerse con el juego en marcha sin necesidad de que el tiempo esté parado.