Advierten el cierre definitivo de comercios en el Gran Mendoza

Un simple recorrido de unas cuadras por el centro mendocino permite ver carteles nuevos de "Se alquila" en donde hasta hace semanas funcionaba una verdulería y dietética, o un local de una boutique vacío pero todavía con perchas en su interior. Se trata de las primeras muestras del impacto del cierre comercial durante más de 50 días y con perspectivas de una lenta recuperación futura. Sostienen que en los próximos días, según las medidas que se adopten, esto podría agudizarse.

Sobre calle Colón-Arístides Villanueva, algunos cafés, bares, restaurantes y cervecerías tienen un cartel con el horario de envío a domicilio. En otros, el incipiente movimiento muestra que ya comienzan a prepararse para la posible implementación del "take away" (para llevar). También se observan carteles con el número de teléfono o las redes sociales para venta online en las vidrieras de tiendas de ropa y de calzado.

Pero en algunos, los papeles de diario detrás de los vidrios se han puesto amarillos y es difícil saber si se trata de algo temporario o definitivo. Y en ciertos locales ya es evidente el vacío de mercadería. Desde uno de los restaurantes que no ha cerrado explican que este mes es decisivo y que mucho depende de si habilitan la apertura, aunque sea con 50% de ocupación, ya que con el envío a domicilio no alcanzan a cubrir costos.

Aun así, hay negocios gastronómicos que tienen cartas pensadas para los turistas que vienen con dólares, por lo que resulta difícil saber si el hecho de que permitan la reapertura podría marcar una diferencia en estos casos.

Desde la comuna capitalina señalaron que las bajas de comercios que se han producido en abril habían sido solicitadas antes de la pandemia. El secretario general del Centro de Empleados de Comercio, Fernando Ligorria, comentó que no han registrado despidos, sobre todo por el establecimiento de la doble indemnización, primero, y de la prohibición de suspensiones y despidos, después.

Sin embargo, también reconoció que hay mucha informalidad y que este puede ser uno de los motivos de que no hayan sabido de desvinculaciones, por lo que aguardan la reapertura para hacer un relevamiento. Ligorria señaló que es difícil recabar datos ahora porque muchos comercios han estado cerrados durante 50 días y no hay modo de saber si se trata de un cierre definitivo hasta que se reanude la actividad.

Sin embargo, Estanislao Puelles Milán, presidente del Colegio de Corredores Públicos Inmobiliarios de Mendoza, señaló que el mes pasado se rescindieron contratos de dos de cada 10 locales comerciales. Esto, pese a que abrir un local demanda una inversión que los comerciantes intentan preservar.

Lo particular de la situación actual es que no se trata de que dejen un espacio para alquilar otro, sino que el lugar queda desocupado. Además, la morosidad subió al 30%, pese a que hubo acuerdos de reducción de 25 a 50% en algunas situaciones. Puelles Milán anticipó que, pese a los esfuerzos, es probable que en mayo las rescisiones se incrementen, sobre todo de negocios gastronómicos, de turismo o los que se encuentran en la cercanía de colegios y universidades.

Grandes cadenas

Esta semana Starbucks anunció que cerrará dos de sus locales, ubicados en el Mendoza Plaza Shopping y en Palmares Open Mall, mientras que Burger King hará lo mismo con el que tiene en Palmares. Alsea, el grupo mexicano licenciatario de las dos cadenas en el país, comunicó el cierre de 13 locales en distintas partes del país -conservará 253- y lo atribuyó a una caída en las ventas de más del 11% en el primer trimestre de 2020 en comparación con el mismo período de 2019.

Javier Gantuz, titular de la Cámara de Comercio y Franquicias de la Ciudad de Mendoza, señaló que Starbucks y Burger King son cadenas internacionales que se manejan por objetivos y que ya venían con la idea de reducir el número de locales en el país; decisión que la pandemia aceleró. Sin embargo, distinguió este caso del de las empresas franquiciantes de Mendoza, de las que han iniciado un relevamiento pero hasta ahora no tienen novedades de cierres.

Pese a eso, manifestó saber que el impacto de las medidas sanitarias ha sido muy marcado en el nivel de ventas y que puede haber algún franquiciado que haya cerrado. De todos modos, manifestó que también ha habido alguna apertura de negocios gastronómicos y operaciones de compra-venta. Pero resaltó la necesidad de contar con una "hoja de ruta" por parte del gobierno nacional, para saber por cuánto tiempo deberán esperar para la reapertura de los locales.

Andrés Zavattieri, gerente del Mendoza Plaza Shopping, indicó que, aparte de la cadena de café (la de comida rápida se mantiene), no han tenido novedades de otras marcas que tengan previsto retirarse, pero que si ocurriera, analizarán cada caso. Desde el mes pasado, el centro comercial no está cobrando el alquiler a los 132 locales, aunque sí las expensas, para seguir brindando el mantenimiento.

Aunque unos 30 negocios están trabajando con delivery o venta online, Zavattieri manifestó que esperan poder abrir pronto porque, pese a que se los ve como una gran empresa, la mayoría de los negocios son pymes, con una economía 100% en blanco, que deben pagar sueldos a sus empleados.

Tampoco han tenido bajas en La Barraca y también se han ofrecido beneficios a los locatarios, que pretenden sostener incluso cuando reabran. Romina Schvartzman, gerente comercial del paseo de compras, señaló que unos 10 negocios de comida implementaron envío a domicilio y cerca de 50 de otros rubros -de un total de 130- está vendiendo por Internet. Desde el centro comercial han reforzado la publicidad en redes y lanzaron una promoción, por la que los clientes se llevan una botella de vino con su compra.

Schvartzman se mostró esperanzada con poder volver a abrir a fin de mes o principios de junio, ya que en la provincia ha habido pocos casos. Los shopping de la provincia han elaborado protocolos, siguiendo lineamientos de la cámara nacional, que contemplan restricciones en la ocupación (de un 50% en los patios de comida), acceso a sanitizantes,  refuerzo de la higiene, toma de temperatura antes del ingreso, etc.

Caída de 70%

La Federación Económica de Mendoza realizó un relevamiento entre el lunes 27 y el jueves 30 de abril que incluyó a comercios pequeños y medianos de la Ciudad y de varios departamentos. El resultado mostró que el mes pasado las ventas minoristas cayeron un 70,27% interanual en promedio, con un descenso de 24,35% en los rubros esenciales y de 85,57% en los restantes.

El rubro que tuvo un declive más marcado fue el de Electrodomésticos y Artículos Electrónicos con -90,24% anual, producto no sólo del cierre (aunque vendieron online) sino de la caída del poder adquisitivo.

En Ropa y Artículos deportivos, y Calzados y Marroquinería las ventas también se redujeron en torno al 90% anual. En estos negocios, que estuvieron cerrados varios días, tuvieron dificultades para implementar la venta online y por redes sociales ya que pocos tenían una página web que les permitiera desarrollar todo el circuito de venta. Además, enfrentaron problemas de abastecimiento y de suba de precios por parte de los proveedores.

El análisis muestra que aún los comercios que fueron considerados esenciales tuvieron bajas en las ventas. El menor descenso se dio en Alimentos y Bebidas (-21,56%), y en Farmacias, Perfumerías y Cosméticas (-21,50%).

Cambiar el rumbo

La cervecería y bar Kallpa abrió sus puertas ocho días antes de que entrara en vigencia el aislamiento preventivo. "Pasamos de un bar con glamour a un parripollo", comenta con humor Jeremías Leiva, uno de los socios del emprendimiento. Para poder pagarle a los empleados, decidieron prender el fuego y cocinar pollo a las brasas, que entregan a domicilio los días sábados.

"Un pollo para Esculapio" es el nombre que le dieron a esta iniciativa, a modo de cita del "gallo para Esculapio" que alude a las últimas palabras que dijo Sócrates antes de morir, preocupado por saldar su deuda. "Nosotros también queremos irnos sin deudas, si es que nos tenemos que ir", lanza Leiva.

El primer fin de semana vendieron un cajón de pollos (hay promos con ensalada rusa, pan casero y diversas bebidas). El segundo, dos cajas. Y esperaban seguir con la progresión el pasado y poder repartir lo que han juntado entre los empleados. Además, entre semana entregan a domicilio growlers de cerveza artesanal patagónica.