Un baño de confianza antes del derby

Real Madrid no tuvo ningún tipo de respeto por Anfield. Ni leyó el mensaje del túnel de vestuarios ni escuchó el “You’ll never walk alone”. El mítico estadio del Liverpool conoció lo que es el silencio cuando comenzó a jugar el Merengue. El campeón de Europa dibujó su escudo en el terreno de juego y resaltó su corona de rey del continente. Subrayó su nombre. Su historia y su presente. El local poco y nada pudo hacer. Anfield fue conquistado por un equipo arrasador que mostró todo su potencial.

El Madrid hizo un trabajo casi perfecto. Aguantó las primeras embestidas del Liverpool, al que le sobra corazón y le falta fútbol. El visitante, mientras, no se descompuso cuando tuvo que defenderse y maravilló sobre la alfombra roja que se colocó en Anfield. Puso su figura por delante. El 4-4-2 volvió a funcionar y todo fue rodando.

El team de Ancelotti gobernó el partido en todos los aspectos. No sólo con el balón, que siempre movió con sentido. Con Modrid y Kroos a los mandos, James e Isco no fueron menos. Todo lo contrario. El andaluz completó una noche grandiosa que siempre estará marcada en rojo en su carrera. Dio un recital. Y no sólo con la pelota. Su trabajo sin ella fue sobresaliente. El mago también utilizó la escoba.

Así el Madrid amansó el ímpetu inicial de las fieras locales y luego las hipnotizó con un fútbol superlativo. Los goles fueron consecuencia natural de lo que pasó. El Real jugó a su antojo y quedará para la historia. Cristiano, no podía ser otro, fue el primero que marcó.  Comenzó la jugada, recibió un pase genial de James Rodríguez y puso el 1-0. No había respuesta posible de Mignolet ni de los que le defendían. This is CR7. A uno de Raúl, general del gol de la Champions hasta dentro de unos días.

Los dos tantos siguientes los firmó Benzema. Comenzó con un gran  cabezazo. No hacía falta rematar con fuerza, sólo con tacto. Así hizo el 0-2 a pase de Kroos. Luego, marcó el tercero tras un córner en el que apareció Pepe y el “1” local dudó. No, Karim. Sí, el delantero del Real Madrid y mucho más. Impartió una clase de cómo interpretar los ataques.

El Liverpool, por su parte, tuvo el mérito de creer en lo imposible. Y pudo tener esperanzas, pero el palo y Casillas lo evitaron antes del descanso. El conjunto red lo intentó en la segunda mitad. El Madrid, claro, siguió en su línea de perfección. No se asustó ni un pelo y volvió a clavarse otro largo rondo hasta el final. Solamente le faltó otro gol de Cristiano Ronaldo, sustituido a cuarto de hora para el fin de la fiesta, que tuvo ovación incluida. Había que descansar. El Clásico es el sábado.

Sigue rompiendo récords

Cristiano Ronaldo abrió ayer el marcador para el Real Madrid con un golazo y ahora no solamente lleva 10 partidos seguidos convirtiendo (siete por Liga y tres en Champions), sino que asimismo sentó dos precedentes históricos en Anfield. Su tanto, materializado en el minuto 22, es el primero del equipo Merengue en el estadio  de Liverpool y también el primero que logra él mismo en feudo red, donde no había mojado ni como madridista ni antes con el Manchester United. Además, el vigente Balón de Oro y Bota de Oro, trofeo éste compartido con el ahora Blaugrana Luis Suárez, está encendido a días del Clásico del Bernabéu.

Igualado, o casi, con Raúl. A las estadísticas detalladas anteriormente cabe agregar que CR7 convirtió en 20 de sus últimos 29 encuentros y que suma 71 goles en la Liga de Campeones, empatando con el recordman, el también madridista Raúl González Blanco. Messi por su parte lleva 69. Sin embargo, a efectos de la UEFA, el delantero portugués lleva 70, porque no se le contabiliza uno ante el Debrezen en la eliminatoria previa de la temporada 2005-06, cuando aún militaba en el United.

Fiesta del Alético y derrota de la Juventus

Juventus tenía la posibilidad de cortarse del resto en el grupo A. Pero, en Grecia, el equipo de Carlos Tevez perdió con el Olympiakos de Alejandro Domínguez y así dejó escapar a Atlético Madrid, que goleó al Malmö, en España. De esta forma, el conjunto dirigido por Diego Simeone quedó puntero con seis puntos, dos más que italianos y griegos.

Pese a sus aspiraciones, desde el arranque del partido Olympiacos se hizo dueño de la pelota. Aunque la primera situación de peligro la llevó Juventus, a los 20’, cuando a Tevez le anularon un gol por una clara  posición adelantada, la respuesta griega fue 60 mas tarde, cuando Masuaku habilitó al Chori Domínguez, quien dominó la pelota y luego sacó su zurdazo cruzado que se fue cerca del palo izquierdo.

Había sido una aproximación del local, que a los 36’ sí llegó al primer gol del partido. El Chori otra vez fue clave, arrastró marcas y abrió la pelota a la izquierda para Mitroglou, quien lo vio a Kasami ingresando por el medio y metió el pase atrás para que para que el suizo anotara el 1-0.

Gran triunfo colchonero. Atlético Madrid encadenó su segunda victoria en fila, tras superar en casa por 5-0 al Malmoe sueco. Los goles del triunfo Colchonero llegaron en la segunda parte, por medio de Koke, Mandzukic, Griezmann, Godín y Alessio Cerci. En la siguiente jornada, la cuarta, Atlético y Malmoe volverán a enfrentarse, pero en Suecia, el 4 de noviembre, al igual que italianos y griegos lo harán en Turín.

Un gran paso. Arsenal sufrió para derrotar al Anderlecht (2-1) y se acercó a la clasificación. Con goles de Gibbs y Podolski, los ingleses remontaron el tanto inicial del hondureño Andy Najar, quien había puesto en ventaja al equipo belga.