San Rafael: agasajaron a los abuelos por su tarea familiar y social

Desde hace seis años el Colegio San Rafael de los Hermanos Maristas realiza el denominado "Té de los Abuelos" como una forma de rendir honores a las personas mayores y reconocer su labor de años en el departamento.

El encuentro está organizado por la Comisión de Padres de la institución de calle Avellaneda y tiene la finalidad de reconocer todo el trabajo que la gente mayor ha hecho por la comunidad y su familia.

El hermano marista Eugenio Magdaleno es el encargado en cada edición de la recepción y palabras de bienvenida.

En esta oportunidad, para significar el esfuerzo y el reconocimiento a los mayores, dijo, entre otros conceptos:

“Las generaciones jóvenes creen que todo se da en forma espontánea y yo a los alumnos de quinto año siempre les digo que deben mirar al piso, por donde caminan, porque en el piso están las acequias -por ejemplo- y éstas fueron forjadas por sus tatarabuelos con 10 grados bajo cero y nosotros hoy no somos capaces de hacerlas ni con máquinas retroexcavadoras. Nuestros antepasados lo que no tenían de tecnología lo tenían de voluntad, que es una excelente tecnología”.

Otra de las virtudes de los mayores señaladas por el religioso en sus palabras es la tarea de los abuelos. “En las familias integradas por matrimonios jóvenes, los abuelos tienen una característica especial con una misión importantísima que es prácticamente materno-paterna, porque en estas familias actuales los abuelos son los comodines que tapan lugares que muchas veces los padres no pueden cubrir por sus obligaciones... Tienen, en definitiva, una importantísima función de prolongación de servicio en sus vidas para sustituir tareas que van más allá de simplemente ser abuelos, de ser quien visita a los nietos”, especificó.

Magdaleno agregó que el hombre moderno sólo piensa que lo que no es joven no luce. “Si no es nuevo, o todo maquillado, no sirve. El té de los abuelos es un homenaje a las canas, a las arrugas y a las cosas que son buenas no porque sean la última palabra de la modernidad, sino porque están al servicio de una misión, de una causa... Hoy existen hombres y mujeres de 80 años que son jóvenes y hay jóvenes de edad que parecen tatarabuelos. Parecen cansados, arrastran los pies y es por ello que los abuelos deben estar orgullosos de sus canas y arrugas porque detrás de eso hay trabajo, esfuerzo y frutos. Son canas con raíces”, finalizó.

El encuentro

Esta reunión es un té que se realiza con invitaciones para alrededor de 200 personas y en sus distintas ediciones ha tenido una amplia aceptación.

Otro de los ingredientes que tiene es la presentación de un show artístico, una peña bailable, sorteos y un sinnúmeros de actividades sorpresa que se desarrollan durante la noche.

La entrada es gratuita y debe retirarse con anticipación en el mismo colegio. Con ella se participa de los sorteos.

Para las próximas ediciones se está pensando ampliar el lugar dentro del mismo gimnasio, para que participen más abuelos y abuelas y esto implica que se deberá reducir el lugar donde se actúa o está preparado para el show artístico.

El servicio de mesas lo hacen las maestras del jardín, de la escuela primaria y también madres de alumnos del mismo colegio ataviadas con uniformes confeccionados especialmente para esta “gala”.

Desde la dirección del colegio y del té de los abuelos, se está analizando la posibilidad de realizar una edición de invierno y agregarle la modalidad del té canasta ampliando el número de invitados y buscando beneficiar a alguna institución sanrafaelina.

El “Té de los abuelos” es otra de las tantas actividades que se realizan en el colegio San Rafael de los Hermanos Maristas y ya forma parte de la tradición de la institución y todo el año cada abuelo que ha participado en otra edición espera ansioso la convocatoria al encuentro.