Pena mínima por el crimen del “hombre más fuerte de país”

El empleado municipal y cartonero Fernando Pesetti (50) fue condenado a 8 años de prisión por el asesinato de Alan Garay (43), un conocido fisicoculturista conocido como "el hombre más fuerte de Argentina".

Ayer por la mañana los jueces Ariel Specktor, Roberto Uliarte y Rafael Escot entendieron que se trató de un caso de homicidio simple en el que el fisicoculturista agredió primero al homicida y luego éste tomó un cuchillo y lo mató.

Durante los alegatos, el fiscal de cámara Darío Tagua había solicitado para Pesetti una pena de 12 años de cárcel.

En cambio Sergio Carreño, abogado defensor del cartonero, había sostenido que se trató de un crimen "en exceso de legítima defensa" y, en caso de que el tribunal considerara que se trató de un homicidio simple, solicitó la pena mínima. Esta posición fue la que finalmente adoptaron los jueces.

Alan Garay murió el 2 de mayo del año pasado en San Martín al 2900 de Las Heras, luego de recibir un par de puñaladas.

Según la investigación Pesetti se encontraba revisando la bolsa de la basura del hombre musculoso en busca de cartones o basura para vender.  Al dejar los residuos desordenados, Garay increpó al recolector y luego lo atacó propinándole una dura golpiza.

Entonces Pesetti fue hasta la bicicleta donde tenía un bolso, sacó un cuchillo y en ese momento habría apuñalado al Garay.

Posiciones discordantes

Ayer el fiscal Tagua sostuvo durante su alegato que no podía considerar el crimen como un caso de legítima defensa porque, luego de que el imputado"persiguió" -cuchillo en mano- a Garay quien le pedía que no lo apuñalara. Es decir que el peligro para Pesetti había pasado porque la agresión había cesado.

El fiscal sostuvo como cierta la versión de algunos testigos que estaban en la ferretería en cuyo frente se inició la pelea.

Según estos testigos, se produjo una discusión por unas bolsas de basura que Pesetti estaba manipulando y entonces Garay le dio una fuerte golpiza, dejándolo tirado en la vereda, ensangrentado.

Garay le decía que se fuera pero Pesetti sacó un cuchillo de un bolso Garay se lo quiso quitar, recibió algunas heridas en los brazos y entonces Pesetti  comenzó a perseguirlo algunos metros hasta que el hombre musculoso tropezó y cayó al piso. Allí le dio un par de puñaladas que resultaron fatales.

"Pesetti quiere demostrar que recibió un duro castigo pero sin embargo está claro que sacó un cuchillo y comenzó a perseguirlo.  Los golpes recibidos no lo autorizaban a agredir porque la golpiza ya había cesado", afirmó el fiscal.

En cambio la posición de defensor Carreño fue distinta: sostuvo que Garay "era un arma caminado y que atacó a su cliente de forma irracional" al punto de dañarle gravemente un ojo.

Luego indicó que Pesetti sacó un cuchillo de su bolso porque vio que su vida estaba amenazada y que si existió algún tipo de persecución fue porque nadie se aseguraba al cartonero que el musculoso lo volviera a atacar si él quedaba desarmado.

Luego sostuvo que el fisicoculturista agredió al cartonero porque se sentía impune ante un hombre que tiene una discapacidad física del 35%.

"Pesetti fue víctima de un abusador. No quería matar a nadie, estaba buscando cosas par vender y de repente se vio envuelto en una pelea".