Ofrecen frenar suba de la luz a cambio de plata para sueldos

Subsidiar $5 millones mensuales para pagar los salarios, además del compromiso de realizar la postergadísima audiencia pública que finalmente determine nuevos cuadros tarifarios para el servicio eléctrico en Mendoza, son los pilares sobre los que se apoya la firma del nuevo convenio de Convergencia Tarifaria versión 2015. El que el gobernador Pérez ya suscribió con la Nación comprometiéndose a congelar tarifas hasta fin de año, pero que aún requiere ser refrendado por las empresas concesionarias.

“En diez días debería estar todo resuelto. Sabemos que el tema de las paritarias es central, y por eso está contemplado en la llegada de los fondos comprometidos”, aseguró el ministro de Energía, Marcos Zandomeni, acerca del nuevo acuerdo para extender el cepo hasta terminar el 2015.

Los $5 millones a distribuir por mes para el pago de los sueldos de las empresas son la red de contención de la paritaria eléctrica,  en torno al 40% de ajuste que planteó formalmente el sindicato de Luz y Fuerza. Y representan 30% de los $370 millones a destinar por la Nación al sistema eléctrico local hasta 2016, a cambio de contener la inflación: otro 20% irá a pagar insumos y 50% para obras.

Pero el texto aún no escrito del acuerdo contempla un plus que desvela a los concesionarios del servicio: la audiencia pública para reacomodar tarifas, en suspenso desde julio de 2013.

La promesa de fijar fecha para  esa discusión antes de que concluya el año es música en los oídos de los ejecutivos, y una jugada clave del Ejecutivo para lograr que, lapicera en mano, finalmente los responsables de las empresas concesionarias refrenden el convenio versión 2015.

Desde las distribuidoras lo toman con pinzas. Aunque varios optaron por no exteriorizarlo, saben que las opciones se agotan.
Pero además especulan con los tiempos políticos en un año eleccionario. "Agosto sería una buena fecha, porque para entonces habrán terminado los comicios provinciales y se abriría un bache de dos meses hasta los nacionales", arriesgaban ayer.

Se trata de desempolvar los estudios de costos elaborados en 2014 por el Epre (Ente Provincial Regulador Eléctrico), justo antes de que el gobernador Pérez sorpresivamente le bajara el pulgar al proceso de readecuación. Para Raúl Stasi, gerente general de Edeste S.A., “estamos impulsando que continúe la revisión cuanto antes. No falta nada para hacerlo”.

Precisamente, el rol del Epre (Ente Provincial Regulador Eléctrico) será clave en cuanto al reparto y destino de los fondos. “Si bien  falta el de aplicación, habrá auditoría y control de  los certificados. Y una vez emitido el decreto, corresponderá hacer el llamado a la audiencia”, resumió su titular, Elián Japaz.

Las promesas, por escrito

Después de 7 años (la última fue  en 2008), la audiencia pública para readecuar cuadros tarifarios es una llave tan importante para destrabar el pacto, que los concesionarios no quieren que las palabras se las lleve el viento. Por eso, con 2 postergaciones encima (julio 2013 y febrero 2014), exigen pasar en limpio la promesa.

Sobre el punto, Stasi sintetizó la postura predominante: “El Ejecutivo evaluará la oportunidad de aplicarlo. Pero lo que falta es la norma escrita con el plan de revisión tarifaria; es necesario amparar la dificultad para las empresas. ¿Qué pasa si terminada la Convergencia no se concreta?”

Ayer había coincidencias en que con esa condición la firma sería inminente. El otro punto clave a poner en papel: cuándo se cancelarán los $ 170 millones pendientes sobre $ 200 millones de Convergencia 2014.

Zandomeni redobló la apuesta, al asegurar que “desde la firma los pagos se completarán en los siguientes tres meses”. La señal, ayer mismo, fue acelerar el desembolso de $ 13 millones a Edeste.

Por no fue la única. También Cammesa, la administradora del sistema mayorista eléctrico y principal acreedor de Edemsa,analiza flexibilizar el plan de pago para que la principal distribuidora provincial regularice su pasivo en 48 meses en vez de 36. Y así pueda recibir la asistencia financiera, vedada por la deuda.

Tras reconocer que “contener la inflación es lo más importante, pero es necesario actualizar las tarifas”, el ministro anticipó que será herencia política de su gestión.

“Con la audiencia pública vamos a dejar el camino hecho para que el próximo Gobierno decida la aplicación de los cuadros”, completó el ministro.