Mayores de 60 años se mantienen activos pero hacen poco ejercicio

Son algunas conclusiones de una investigación que busca hacer una radiografía de la situación de estas personas en el país. 5 de cada 10 se atiende en hospitales públicos, no posee cobertura médica.

Gran parte de los adultos mayores actuales tiene una vejez activa y participativa, tienen  proyectos, se ocupan de sí mismos,  salen e incluso muchos viajan. Un estudio realizado por el Observatorio de la Deuda Social Argentina de la Universidad Católica Argentina (UCA) expresó que 7 de cada 10 personas mayores, aun cuando perciben su salud comprometida, no tienen dificultades para pensar proyectos personales y mantenerse activos. 

El informe "Las condiciones de salud de las personas mayores. Sus aspectos más críticos" fue presentado el viernes y buscó "ofrecer una descripción de los perfiles sociales de quienes se encuentran en diferentes situaciones de vulnerabilidad frente a la salud". Además "evaluar quiénes son los mayores en Argentina que hoy acusan enfermedades graves o crónicas, y/o niveles de malestar psicológico".

De acuerdo a sus conclusiones puede inferirse que gran parte de quienes superan los 60 años tiene una perspectiva positiva de la vida: 80,6% de los consultados,  incluso si reconocen su salud comprometida, no declaran sentimientos de infelicidad.

De los mayores de 60 años encuestados, 23,9% dijo sentir déficit en su salud o malestar psicológico. Este se refiere a capacidades emocionales cuyo déficit se expresa a través de la sintomatología ansiosa o depresiva de las personas lo que dificulta las actividades cotidianas.

Sin embargo, se trata de una generación que en términos generales se mantiene activa en cuanto a las demandas diarias básicas.

“Encargarse de la limpieza, el lavado y el planchado, por ejemplo, no disminuye como actividad entre quienes perciben su salud comprometida: 2 de cada 3 con este registro en su salud realizan dichas tareas, tal como ocurre en el total de personas mayores, con leves diferencias”, detalla el informe.

Asimismo, 74% de quienes sienten su salud comprometida prepara la comida, la misma proporción que también se encarga de hacer compras. Sí disminuyen la actividad de cuidado de niños y otras personas, sólo lo hace 35% de ellos.

El nivel de formación incide en esta actitud: "quienes han tenido menos oportunidades de instrucción muestran mayor propensión a percibir problemas de salud", se destaca. Para graficarlo, 75% de quienes se perciben con malestar psicológico tienen secundario incompleto o menos.

Por otra parte, en función de la población consultada pudo saberse que el malestar psicológico está asociado a quienes comparten el techo con ellos. Se sostiene que tienen menos probabilidad de sufrirlo quienes conviven únicamente con personas mayores que quienes lo hacen con gente de otras generaciones o simplemente solos.

El geriatra Marcelo Barcenilla dijo que no cree que 7 de cada 10 tenga proyectos personales, “con la situación  económica que tienen sólo piensan en ver cómo comen, compran medicamentos y van al médico”.

También le puso un baño de realidad a la proporción de personas que no declaran infelicidad y apuntó que “la mayoría tiene pluripatologías o aislamiento social por duelo del cónyuge y entonces, al contrario comienzan a ser más pesimistas”.

En este punto marcó la diferencia entre la vejez activa, quienes son más positivos y los inactivos, que tienen una vejez pasiva y más aislada socialmente, que lleva a muchos a  la depresión,

En cuanto a la convivencia resaltó que hay que tener en cuenta que quienes viven en hogares geriátricos están todos juntos,  los sanos con los que tienen alguna demencia y eso es contraproducente.

Déficit de actividad física

Pese a mantenerse activos, el trabajo pudo identificar que una gran proporción presenta déficit de actividad física, algo que afecta a gran parte de la población en general.

El informe detalla que se considera ejercicio físico el conjunto de acciones motoras, musculares y esqueléticas; habitualmente se asocia a cualquier actividad física que mejora y mantiene la aptitud física, la salud y el bienestar del individuo. El déficit de ejercicio físico mide la ausencia de esta práctica en forma periódica.

Tal carencia tiene un impacto directo sobre su estado de salud. Como es sabido, esta práctica es positiva para el bienestar físico y psíquico. De los consultados, 71% registró déficit en el ejercicio físico, es decir 7 de cada 10, vale aclarar que un cuarto de ellos es mayor de 75 años. 

Por otra parte, esta situación es más común entre mujeres, quienes son 6 de cada 10 de quienes presentan esta carencia. Además la mayoría tiene nivel de instrucción y socioeconómico bajo.

El licenciado en Educación Física, Sergio Furlán relativizó lo que puede considerarse 'déficit' ya que señaló que inciden diferentes variables. "Depende de las condiciones de salud de cada persona, para alguien sano es hacer más de lo que hace habitualmente", pero para una persona que tiene Epoc, quizás salir  a la calle y caminar varios metros ya puede considerarse actividad física.

Por otra parte dijo que influye el ámbito donde viva, ya que en las ciudades tienden a estar más guardados o con menos chances de movimiento pero en el espacio rural realizan muchas más actividades por las necesidades diarias, e incluso por el sólo hecho de tener que trasladarse a mayor distancia.

También incide el nivel sociocultural , quienes tienen hijos con ciertos niveles de formación y/o accesibilidad económica los llevan a realizar rehabilitación o actividades, según el caso, agregó.

Viviana Balzarelli, directora de  Deporte Social y Comunitario de la subsecretaría de Deportes es quien coordina las diferentes propuestas que se llevan a cabo en los municipios. Sabe que hay muchos adultos mayores que se acercan a participar pero también reconoció que muchos quedan afuera. Esto porque desconocen que existen lugares dónde pueden realizar estas prácticas, mientras que muchos tienen depresión.

“Uno de los mayores problemas es el olvido familiar, una vez que saben que pueden integrarse desde lo social lo hacen y no lo abandonan nunca más”, destacó.

Las direcciones de Deportes de los municipios pueden brindar información sobre las diferentes propuestas, no sólo las propias sino también las de uniones vecinales y centros de jubilados. Balzarelli destacó que además de la actividad física “una simple charla, el contacto social les hace mucho bien”.

Acceso a servicios de salud

Para esta franja etaria, el acceso a los servicios de salud es un elemento fundamental, pero además de tratar patologías una vez diagnosticadas, es esencial no perder de vista la necesidad de prevenir otras o atenuar el impacto de las ya existentes.

En cuanto al primer aspecto, el informe detalla que “3 de cada 10 personas mayores se han atendido con el prestador PAMI” mientras que la mitad de ellos pertenece a un nivel socioeconómico bajo.

Por otra parte, “casi 5 de cada 10 personas mayores en Argentina que se atiende en el hospital público no posee cobertura médica”.

El informe de la UCA

La Encuesta de la Deuda Social Argentina, Serie Bicentenario de la Universidad Católica Argentina se realizó de acuerdo a un diseño muestral probabilístico de tipo polietápico estratificado y con selección aleatoria de viviendas, hogares y población

El documento de presentación señala que se ha trabajado con bases apiladas 2010-2016 que cuentan con un total de 19.963 personas mayores relevadas en los hogares de la muestra. Se incluyó hogares urbanos de diferentes ciudades argentinas, dentro de las cuales se incluyó al Gran Mendoza.

El objetivo es contribuir al diagnóstico y la planificación de políticas públicas con relación a la salud de las personas mayores, así como también visibilizar y concientizar acerca de los desafíos que hoy enfrenta ese grupo poblacional.

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA