Los sueldos de Mendoza perdieron contra la inflación

Las paritarias de 2015 promediaron el 30% para personal en relación de dependencia, mientras que los precios subieron 33%. Advierten sobre la caída del poder adquisitivo del salario.

Los salarios del sector privado mendocino perdieron en su carrera contra la inflación el último año. Así lo demuestra un estudio de Gestión Consultores elaborado en función de lo ocurrido entre el primer trimestre de 2015 y el primer trimestre de 2016.

El informe indica que durante ese período los trabajadores que están dentro del convenio sindical tuvieron actualizaciones salariales promedio del 30%, quedando algunos puntos porcentuales por debajo de la inflación.

Según Fundación Ideal, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) acumulado entre el primer trimestre de 2015 y el primer trimestre de 2016, fue del 33%. Para calcularlo, se promediaron las mediciones del IPC de diferentes entidades públicas y privadas de todo el país. Teniendo en cuenta el resultado, se deduce que los precios crecieron más que los salarios.

La misma situación se dio en el personal fuera de convenio. El estudio de Gestión Consultores, realizado en base a encuestas directas a empresas de Mendoza, destaca que los trabajadores del nivel “gerencia” tuvieron aumentos del 30,4% en el período analizado; las jefaturas se actualizaron un 31,5%; los supervisores un 31,5% y analistas el 31%.

La información relevada por la consultora coincide con lo publicado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). El organismo nacional informó que entre el primer trimestre de 2015 e igual período de 2016, el salario de bolsillo (neto) de los trabajadores privados registrados de Mendoza creció 30,79%, pasando de $ 8.758 a $ 11.455 en el promedio de todos los sectores.

Como se puede observar, en todos los casos, las subas salariales están por debajo de los aumentos de precios, lo que se traduce en menor capacidad de compra por parte de los trabajadores.

Acelera la inflación

Para los expertos, la pérdida del poder adquisitivo de los salarios se produjo durante los últimos cuatro meses del período analizado (diciembre de 2015 a marzo del 2016.

El economista Sebastián Laza explicó que “la inflación se disparó mucho desde diciembre, provocando subas de precios por encima de lo proyectado en las paritarias de 2015”.

También Paula Pía Ariet, directora de Gestión Consultores, remarcó que “los precios subieron más de lo estimado por gremios y empresas”. La experta explicó que en otro informe, realizado a fines de 2015, las empresas habían manifestado su intención de hacer ajustes salariales de entre el 13% y el 14,5% en el primer semestre de 2016.

“Debido a los fuertes aumentos de precios que se dieron en los primeros meses del año, las empresas decidieron aplicar aumentos salariales del 17,42% en promedio durante los primeros 5 meses de este año, corrigiendo lo calculado algunos meses atrás”, indicó.

El economista Rodrigo González coincidió respecto del desajuste producido entre precios y salarios en los últimos meses. “Los precios subieron mucho antes del inicio de paritarias. Desde diciembre en adelante hubo un ajuste del tipo de cambio del 50% (suba del dólar); subieron las tarifas de luz y gas, aumentaron los combustibles y se sinceraron los precios de muchos otros productos y servicios. Mientras tanto los salarios han estado quietos esperando los cierres de paritarias”, señaló el economista.

Por su parte, el economista José Vargas, director de Evaluecon, consideró -según las estimaciones de la consultora- que desde noviembre de 2015 a abril de 2016 la caída del poder adquisitivo en Mendoza fue del 30%, “incluso teniendo en cuenta aumentos salariales”.

Menor presión sindical

Sebastián Laza destacó que es normal que en períodos recesivos empiecen a concretarse despidos y los gremios pierdan poder de negociación. Los trabajadores prefieren perder algo de poder adquisitivo frente a la inflación antes que perder sus puestos de trabajo. Esa situación se dio después de la baja de actividad de 2014 y ya se está viendo en 2016. El efecto miedo hace que los sindicatos acepten subas salariales por debajo de la inflación proyectada, incluso en el sector público, comentó Laza.

Como publicó Los Andes en la edición del domingo 22 de mayo, la recesión ya es una realidad palpable en Mendoza. En el primer trimestre de 2016 el Índice Sintético de Producción (ISP) cayó 2% en comparación a igual período de 2015.

En el mismo período se confirmaron numerosos despidos. Una encuesta realizada por el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación, demostró que en el Gran Mendoza se perdieron al menos 1.800 puestos de trabajo entre primer trimestre de 2015 y los primeros tres meses de 2016.

Ambos datos confirman el escenario que, según Laza, repercute en ajustes salariales por debajo de la inflación proyectada, aunque eso se podrá comprobar recién a fin de año, cuando se conozca el aumento real que los precios tendrán durante 2016.

Rodrigo González se mostró de acuerdo respecto al efecto que puede provocar el miedo a los despidos sobre los salarios, pero opinó que esa situación se concreta generalmente en el sector informal.

“Los trabajadores que están en negro no son representados por ningún sindicato y por tanto tienen menos poder de negociación. Es por eso que sus posibilidades de un ajuste acorde a la inflación se reducen mucho en época recesiva”, explicó.

Cada vez hay más beneficios por salarios

Una investigación realizada por Gestión Consultores  reveló que 76% de las empresas mendocinas piensa modificar su política de Beneficios durante 2016.

Paula Pía Ariet, directora de la consultora, explicó que el estudio se hizo por primera vez en 2001 y desde entonces se ha repetido todos los años. “En el informe de 2016 se confirma una tendencia cada vez más fuerte a la incorporación de beneficios flexibles, pensados acorde a las necesidades de los empleados y a la valoración de los mismos”, comentó.

La investigadora señaló que la “Generación Y” (trabajadores de entre 20 y 35 años”, valora fundamentalmente el acceso a planes médicos de compañías prepagas. Según Gestión Consultores, 77% de las empresas de la provincia ofrecen ese beneficio.

“La Generación X (36 a 55 años), en cambio, valora mucho el tiempo libre. Por eso el 50% de las empresas que participaron de las encuestas otorgan beneficios de días libres. Son comunes por ejemplo los francos en días de cumpleaños o las vacaciones adicionales”, indica el informe.

Otra compensación valorada por esa generación es la capacitación. El 54% de las empresas consultadas paga con frecuencia el 100% del costo de cursos de post grado o maestrías.

El economista José Vargas analizó los datos relevados por Gestión Consultores y explicó que “la metodología de beneficios y compensaciones se observa en momentos de mucha inflación, alta presión tributaria y baja actividad económica, como el que atraviesa Mendoza”.

“A su vez, el riesgo de despidos lleva a una mayor aceptación de los beneficios”, concluyó.

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